El gobernador pidió que la provincia sea considerada petrolera. Desde el Gobierno provincial y desde el PRO lo criticaron.
“Queremos convertir a la provincia de Buenos Aires en petrolera” dijo Axel Kicillof argumentando que el 80% de lo que se produce en 10 provincias se destila en la suya. La declaración cayó mal en Neuquén. El primero en criticarlo fue el ministro de Producción, Facundo López Raggi, y lo siguieron desde el PRO.
El diputado nacional Francisco Sánchez le advirtió a Kicillof – a quien calificó de “pequeño marxista”- que él y el kirchnerismo no lograrán quedarse con los recursos neuquinos como pretenden hacerlo.
En la misma línea se expresó la diputada provincial de la misma fuerza. Leticia Esteves, hablando de la “ambición económica y de poder desmedida” y de las “prácticas poco transparentes del kirchnerismo”.
Aseguró que, como forma preventiva ante esta situación, el 11 de marzo presentaron en la Legislatura un proyecto para que se expida en contra de que Buenos Aires se integre a la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi).
Fuente: Rio negro