La compañía puso en marcha la primera cabecera de despacho de crudo de gran escala para el shale oil y se convierte en la principal exportadora de petróleo del país.
Con la habilitación de los primeros dos tanques y la puesta en marcha del sistema de bombeo, YPF completó la última etapa del proyecto Vaca Muerta Norte. La infraestructura permitirá trasportar 160 mil barriles diarios de petróleo hacia Chile y hacia el complejo Luján de Cuyo, en Mendoza.
Esta vía de evacuación reactivada hace que YPF convierta en la principal empresa exportadora de hidrocarburos del país, mientras que Chile es el segundo destino con más envíos desde Argentina en lo que va del año. Este último dato es gracias a la rehabilitación de Oleoducto Trasandino (OTASA), en mayo del año pasado.
El proyecto se integra por un oleoducto de 151 kilómetros, una cabecera de bombeo y un parque de tanques con una capacidad de almacenamiento de 370.000 barriles. Las instalaciones se encuentran en el yacimiento La Amarga Chica, al norte de Añelo, y el punto final de entrega del petróleo es el nodo Puesto Hernández, en Rincón de los Sauces.
Es en ese destino que el sistema conecta con OTASA, que lleva crudo a Chile. Por otro lado, el ducto también conecta con el complejo Luján de Cuyo, en la provincia de Mendoza, garantizando el suministro para una de las principales refinerías del país.
El proyecto de Vaca Muerta Norte implicó una inversión de 250 millones de dólares y tuvo picos de contratación de 1200 personas. Durante su construcción, que demoró unos 18 meses, participaron más de una decena de empresas locales y nacionales.
El proyecto también permitió que YPF se posicione como un actor central en el negocio del midstream, que busca desarrollar y garantizar el transporte de hidrocarburos tanto dentro como fuera del país, potenciando la creación de una plataforma exportadora de energía.
Fuente: Mejor Energía