El nuevo valor, que ya no se rige por el dólar, tuvo un alza del 4,1%
Finalmente el lunes, y luego de más de un mes sin actualizar, la Secretaría de Energía publicó el nuevo precio del biodiésel a partir de una modificación en la fórmula que ahora no dependerá más del tipo de cambio. Esta decisión “inconsulta” provocó que las pymes decidieran acudir a la Justicia a reclamar su marcha atrás. El valor será desde ahora de $28.734 la tonelada frente a los $27.600, de febrero pasado, lo que marca un alza del 4,1%.
“La situación de la industria es crítica, por ende necesitamos que los funcionarios revean de forma inmediata la publicación. En este escenario los socios están planteando acciones legales dado que peligran las fuentes de trabajo que entre directa e indirecta son de 4.000 personas”, señaló a BAE Negocios, el director ejecutivo de la Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb), Francisco Jáuregui.
El ejecutivo recordó que hace un año y medio se cambio la fórmula a partir de un consenso con el Gobierno, algo que no sucedió en la actualidad.
Indudablemente la modificación puntualmente en el dólar da a entender que es a beneficio de las petroleras, que deben cortar el gasoil con un 10% de biodiésel. Pero el bajo porcentaje no debería incidir en el valor final. Ante este escenario, se espera entonces una nueva alza. Algunos consideran que YPF y Shell se adelantaron y realizaron aumentos en torno del 5%.
Si se mantenía la fórmula a la fecha, el valor del producto debería rondar los $30.000, lo que hubiese significado un incremento del 8,7%. El mismo se debe a que el valor del aceite principal componente, está dolarizado y como es sabido el tipo de cambio viene en alza. Desde febrero a la fecha, la moneda norteamericana tuvo un alza del 10,7%.
Las pymes siguen por ahora con sus ventas a las petroleras, pero con números en rojo hará que muchas empiecen a frenar su producción. Es por eso que el sector impulsa un proyecto de ley para generar un marco de apropiado a la industria que signifique elevar el corte.
Esto es llevado adelante por los gobernadores que integran la Liga Bioenergética -Córdoba, Tucumán, Santa Fe, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Entre Ríos y Buenos Aires-, junto a las cámaras empresariales, que ya mantienen encuentros con petroleras, gobierno, automotrices, entre otros sectores para ir armando las bases de un proyecto de ley a presentar en el Congreso que le dé mayor visibilidad y uso a los biocombustibles. La futura norma buscará que tanto el biodiésel y bioetanol paguen cero impuesto o en su defecto que esté por debajo de lo que gravan a los fósiles.
Vale aclarar que desde la Secretaría de Energía, se descree en la capacidad productiva de los biocombustibles. Por ahora sólo se propuso elevar su corte, pero pagando un mayor impuesto.
La Liga ve con buenos ojos el modelo brasileño en donde en donde hay beneficios impositivos que responden mas al lugar de donde proviene el biocombustible. El tema es que la Argentina tiene en el medio la Ley de Coparticipación Federal.
En 2021 se vence la Ley 26.093 que precisamente tiene que ver con la “regulación y promoción para la producción y uso sustentables de biocombustibles”. Hoy no hay una intención del Gobierno en prorrogarla o elaborar una nueva.
Por Merino Soto
baenegocios