En las tres últimas sesiones, en las que el Brent perdió alrededor de un 3,5%, los inversores han ido deshaciendo en gran medida la prima de riesgo geopolítico de los precios del petróleo.
Cuáles son los datos claves que le ponen freno al petróleo
La resistencia del mercado laboral estadounidense, que está impulsando la economía, junto con la elevada inflación han llevado a los mercados financieros y a algunos economistas a esperar que la Reserva Federal de Estados Unidos retrase el recorte de las tasas de interés hasta septiembre. Unas tasas de interés más bajas reducirían los costos de los préstamos y podrían estimular el crecimiento económico y la demanda de petróleo.
En Europa, el Banco Central Europeo dejó claro que en junio se producirá un recorte de las tasas de interés, pero los responsables monetarios siguieron discrepando sobre las medidas a tomar a partir de entonces o sobre hasta qué punto pueden bajar las tasas de interés antes de volver a estimular la economía.
En China, el mayor importador de petróleo del mundo, los altos cargos del banco central afirmaron que aún hay margen para que el organismo tome medidas de apoyo a la economía, pero que es necesario esforzarse para evitar que el efectivo circule por el sistema bancario a medida que se debilita la demanda real de crédito.
Por el lado de la oferta, Venezuela, miembro de la OPEP, perdió una licencia estadounidense clave que le permitía exportar petróleo a mercados de todo el mundo, lo que afectará al volumen y la calidad de sus ventas de crudo y combustible.
Washington también anunció sanciones contra Irán, otro miembro de la OPEP, dirigidas a la producción de vehículos aéreos no armados del país tras su ataque con drones a Israel el pasado fin de semana.
En las tres últimas sesiones, en las que el Brent perdió alrededor de un 3,5%, los inversores han ido deshaciendo en gran medida la prima de riesgo geopolítico de los precios del petróleo, ante la percepción de que cualquier represalia israelí al ataque de Irán del 13 de abril se verá moderada por la presión internacional.
Fuente: Ámbito