Por una cuestión de seguridad, solamente se podrá cargar GNC por la válvula ubicada debajo del capot del vehículo.
Las cargas externas que se le colocan habitualmente a los vehículos que usan Gas Natural Comprimido quedarán sin efecto. Y esto se debe a una normativa que entró en vigencia y en nuestra ciudad, en estaciones de servicio como por ejemplo YPF, únicamente están cargando en los dispositivos que se encuentran debajo del capot, es decir en el motos de los rodados impulsados por este combustible.
Para conocer detalles sobre este cambio, en la estación de servicio Puma que funciona en la zona de avenida Alsina y Merced, explicaron a LA OPINION que “es algo que se estableció hace tiempo y es netamente por seguridad”, contaron ayer; “en la próxima reunión que tengamos con la Cámara que nuclea a las estaciones de GNC se hablará de este tema y a partir de allí todos los despachantes trabajaremos de esa manera, es decir cargando únicamente con el sistema tradicional que está en el motor”, dijo gentilmente el playero de la estación que ya conoció las disposiciones y advertía a los clientes sobre este inminente cambio.
Cabe señalar que el Ente Regulador desde hace unos meses puso a consideración de especialistas una nueva normativa referida al expendio de GNC aplicado al uso como combustible en los vehículos. El motivo: Una serie de accidentes ocurridos durante el despacho en autos que contaban con este dispositivo.
¿Hay más autos a GNC?
Independientemente de estas disposiciones, el gas sostiene su característica de ser un combustible mucho más económico, aún sin quedar exento de los aumentos de las naftas. En estos primeros meses de Javier Milei en la presidencia de la Nación, los convertidores a GNC vienen recibiendo una importante cantidad de consultas para la transformación, aunque los valores de los equipos superan en algunos casos el millón de pesos. Si bien afirmaron que hay movimientos en los talleres, esperan una reactivación mayor de la demanda en los próximos meses.
“No es una cosa de locos, pero el gas siempre sigue siendo una alternativa más barata a la nafta, y sigue manteniendo la brecha con el resto de los combustibles”, explicaron a LA OPINION en uno de los talleres habilitados en Pergamino. El instalador apuntó que aún con los aumentos registrados por el gas durante los últimos meses, la conversión impacta en un ahorro superior al 50% en el bolsillo con respecto de la nafta.
En contrapartida, sin bien son permanentes las consultas para la transformación del sistema de combustible, con el salto devaluatorio, un equipo de quinta generación, “que es el que más se vende, hoy cuesta arriba del millón de pesos”, apuntaron al Diario en otro de los puntos de venta ubicados en la zona oeste de la ciudad.
¿Qué dicen la Cámara?
Desde la Cámara de Expendedores de GNC apuntaron que se espera una suba en la demanda de gas: “Podría haber un crecimiento de la demanda en el próximo tiempo, pero va a ser mínimo, porque el parque de GNC no ha crecido en los últimos cinco años”, sostuvo Pedro González, presidente de la entidad.
“Ahora bien, el GNC es el combustible más barato por ende es el que más se usa. Pero cuando entramos en crisis, como los tiempos relativamente recesivos como el que vamos a atravesar de acá a unos meses, vamos a notar un aumento de la demanda”, se explicó ayer.
Fuente: La opinion pergamino