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Pedro González, presidente de la Cámara de GNC, habló con MDZ Radio 105.5 FM y opinó sobre la conveniencia que podría significar para el usuario cambiar su fuente de combustible en estas épocas.

Debido al consecuente aumento en el precio de la nafta, muchos conductores están considerando la posibilidad de cambiar su fuente de combustible a Gas Natural Comprimido (GNC). La República Argentina atraviesa una compleja situación económica, por lo cuál este cambio sería pensado en ahorrar en épocas no tan favorables para el bolsillo de los ciudadanos. A pesar de los aumentos volcados en ambos combustibles, aún resulta más conveniente transitar con GNC que con los líquidos.

En conversación con MDZ Radio 105.5 FM, Pedro González, presidente de la Cámara de GNC, aseguró que “la conveniencia de cambiar la fuente de combustible de nafta a GNC depende de la cantidad de kilómetros diarios que haga cada usuario. Estamos en una época lamentable a nivel económico con la inflación. No hace mucho, ya se había implementado en las instalaciones de equipos los sistemas de pago en cuotas con tarjetas. El problema es que ahora el interés es altísimo. Pero, por más que el interés sea alto, por ahí es conveniente para una persona que utiliza el auto 2000 kilómetros por mes, ya que con esto tiene un ahorro a valores de hoy de $130.000 por mes”.

“Los parámetros de amortización para alguien que hace muchos kilómetros todos los días podría llegar a ser de entre seis y nueve meses. Si uno calculara los años promedio que una persona puede tener un auto o puede usarlo, la amortización del equipo es muy relativa porque va a pasar de largo en el tiempo”, aclaró respecto a la conveniencia.

Además, explicó: “El gas se carga comprimido en metros cúbicos. Un tanque de 60, que es el más común en los vehículos particulares, equivalen a 60 litros de capacidad cúbica, no 60 metros cúbicos. Es decir, a la presión que se carga normalmente entran 14 o 15 metros cúbicos. El máximo que puedo cargar está dentro del valor más chico, que es un poco la limitación que existe con la autonomía de los autos”.

Instalar un equipo de gas resulta una buena opción para el bolsillo del usuario.

Valores en alza

El presidente de la Cámara de GNC advirtió que “en las consultas que he hecho con instaladores, esto fue a fines de diciembre, el valor más bajo de instalación que me dijeron fue de $800.000 y el más alto de $950.000. Hace dos meses el precio estaba a la mitad, lo que pasa es que los equipos tienen muchos componentes importados. Además, el haberse disparado y duplicado el precio de la nafta hace que la cabeza de la gente se reconvierta y vea que hay otra opción, entonces empiezan a llamar a los talleres para consultar. Los talleristas como ven que hay una vuelta del público a volcarse al tema de los equipos de GNC, equiparan los precios con la inflación. Ellos estaban vendiendo los equipos, por ejemplo, en $350.000 o $400.000 hace un par de meses”.

“El gas es el combustible más abundante que tiene la Argentina. Y además, el GNC contamina menos de un tercio que la nafta, y ni que hablar del gasoil, es decir, es por excelencia el combustible ecológico que tenemos. El metro cúbico de gas tiene un poco más de octanaje y tiene más rendimiento que el litro de nafta. Un metro cúbico equivaldría a 1,09 promedio del de nafta. Es decir, es un poco más que un litro de nafta, el porcentaje es mínimo”, concluyó argumentando los beneficios del Gas Natural Comprimido (GNC).

 

Fuente: MDZ