Desde Alemania: probamos los últimos asistentes de emergencia que pueden salvar vidas

Sistemas de seguridad para conductores cada vez más distraídos. Esa es una de las máximas a la hora de desarrollar tecnología destinada a salvar vidas o a reducir las consecuencias de los siniestros, y uno de los focos de interés de Latin NCAP, el organismo encargado de evaluar la seguridad de los modelos que se venden en América Latina.

Días atrás en Landsberg, Alemania, donde la entidad realiza sus crash test, tuvimos la oportunidad de probar varios de estos dispositivos y corroborar su funcionamiento e importancia en la práctica.

Las tecnologías testeadas fueron: Frenado Autónomo de Auto a Auto, Frenado Autónomo de Emergencia con Detección de Peatones y Mantenimiento de Carril en Emergencia.

Todos estos sistemas funcionan con cámaras, radar o una combinación de ambos. Y si bien ya están disponibles en Europa, Latin NCAP quiere incorporarlos lo antes posible en el protocolo de evaluación de los modelos destinados a Latinoamérica. El motivo es simple: ayudan a salvar vidas y minimizar daños en caso de siniestro.

A prueba de conductores distraídos

La primera prueba que nos tocó fue la de Frenado Autónomo de Auto a Auto. En este caso el modelo sobre el cual testeamos la tecnología fue el último Nissan Qashqai.

El ejercicio: acelerar a 40 km/h de manera constante y apuntarle directo al inflable que simula otro auto. La idea es que el sistema intervenga cuando el conductor está distraído, por lo que no hay que desacelerar, ni frenar, ni mover la dirección de manera decidida. Dicho de otro modo: cuanto más distraídos vayamos mejor va a funcionar el sistema, porque está hecho justamente para entrar en acción en situaciones de emergencia.

Superado el instinto que a uno lo llevaría a levantar o frenar al acercarnos a un obstáculo, y ante la inacción del conductor, el Qashqai clava los frenos. Sorprende la anticipación con la que lo hace, tanto que el vehículo se detiene varios metros antes del supuesto vehículo detenido.

Lo que acaba de pasar aquí es un ejercicio más. En la vía pública, un siniestro menos.

Los peatones primero

La segunda prueba es a bordo de un Renualt Mégane E-Tech completamente eléctrico. Nos acercamos a 30 km/h a lo que sería una esquina, y cuando falta muy poco para llegar el muñeco de un peatón se lanza a cruzar.

Cabe aclarar que desde adentro el impacto parece inevitable, sin embargo, el Mégane aplica el máximo poder frenante y el peatón logra cruzar sin ser impactado. Estamos ante lo que podría salvarle la vida o serias lastimaduras a una persona.

El día está soleado y las condiciones son óptimas, pero el personal de Latin NCAP nos cuenta que el sistema también lo prueban de noche y con otros muñecos que simulan un animal que cruza la calzada, un ciclista y hasta un niño. Es que este tipo de tecnología de última generación mejora continuamente, incluso es notable el salto cualitativo con los mismos ensayos realizados en años anteriores.

En velocidad

La última prueba es a bordo de un Volkswagen ID.3, también 100% eléctrico. Esta vez es el turno del Mantenimiento de Carril en Emergencia.

El escenario recreado es el siguiente: viajamos a más de 60 km/h, pero vamos distraídos y nuestro auto empieza a invadir el carril contrario justo cuando un vehículo (en el test una recreación blanda lógicamente) se aproxima de frente a una velocidad de 50 km/h.

Así lo probamos y justo en el momento en que nuestro ID.3 se sale del carril el sistema corrige activamente la dirección y lo devuelve al carril. Sin duda una tecnología que puede salvar vidas.

Se trata, en este caso, del asistente de emergencia, que a diferencia del Mantenimientos de Carril a secas tiene un comportamiento más “agresivo” e intervencionista.

Lo interesante de estos sistemas es el ritmo al que evolucionan, y que incluso cuando en malas condiciones -como puede ser una tormenta- no respondan al 100%, siempre minimizan las consecuencias de errores humanos.

Se termina la jornada y como en otras ocasiones la conclusión indica que, si bien la seguridad se compone de muchos puntos (infraestructura, educación, controles, etc.), la tecnología es un aliado clave del que debe aprovecharse todo su potencial.