Si bien disminuyó la producción de shale oil en mayo, de todas maneras los resultados interanuales fueron positivos para el país. Las exportaciones de crudo alcanzaron los 116 kbbl/d en los primeros cinco meses del año.
Argentina viene recuperando producción de crudo, de la mano del desarrollo no convencional en Vaca Muerta. Y los números así lo reflejan. Sin embargo, a lo largo de los últimos meses la cantidad de pozos de explotación terminados de petróleo (entre convencional y no convencional) se mantuvo relativamente estable, aunque por debajo de lo alcanzado a fines de 2022. En el mismo sentido, aunque en mayo creció la cantidad de pozos enganchados de shale oil, aún no llega al número verificado en diciembre y enero. Fueron 38 en total, lejos de los 61 que hubo en septiembre de 2022 y en niveles similares a marzo y abril de ese año.
Esto hizo que la producción total de petróleo “registrara una disminución en términos intermensuales”, aunque muy leve, pero “un crecimiento interanual (pasando de 593 a 649 kbbl/día), pero inferior a lo que se venía observando en los meses previos”, equivalente al 8% para el mes de mayo. Así lo señaló en su informe de coyuntura del mes de junio, la Consultora Economía y Energía (E&E).
Al contrario de lo que sucedió con el crudo, el comportamiento del gas en el mes de mayo registró un crecimiento intermensual de la producción total del 4,6% (en línea con el incremento estacional de la actividad). Sin embargo, el aumento interanual de la producción de shale gas fue del 11% en mayo, valor muy inferior a las tasas de crecimiento verificadas en 2022.
Refinación
El crudo procesado por parte de las refinerías locales promedió los 534 kbbl/día en los primeros cinco meses del año. Dicho valor se ubica por encima de los niveles verificados en los años previos (+14% respecto del mismo período de 2019 y 2022).
De acuerdo a lo planteado por el informe, en base a los datos del Indec y la Secretaría de Energía, “entre enero y mayo de 2023 el crudo procesado de cuenca neuquina alcanzó una participación del 62%, incrementándose en 9 puntos porcentuales (p.p.) respecto del mismo período de 2019.
De acuerdo a los datos del Instituto de Estadística y Censo, “el factor de utilización alcanzó el 83% en marzo de 2023, el valor más elevado de los últimos años”.
Exportaciones
El mayor volumen de petróleo que fue exportado surge de la cuenca neuquina, que produce un crudo liviano, mientras que el crudo pesado de la Cuenca San Jorge tuvo un retroceso. En el informe se destacó que la “habilitación del oleoducto de OTASA permitirá seguramente un incremento de las exportaciones de crudo, desde cuenca neuquina, a lo largo de los próximos meses”.
En términos de datos duros, las exportaciones de crudo en los primeros 5 meses de 2023, registraron un incremento interanual del 17%, adicionando 17 kbbl/día más (116 kbbl/día) a lo exportado en igual período de 2022 (99 kbbl/día).
En ese total exportado, 29 kkbl/día vinieron de la Cuenca del Golfo San Jorge (CGSJ), mientras que un año antes en los primeros cinco meses fueron 39 kbbl/día los que se originaron en la cuenca compartida entre Chubut y Santa Cruz.
Esa caída se compensó con el crecimiento de las exportaciones de crudo liviano provenientes de la cuenca neuquina. Estas subieron 41%, al pasar de 53 kbbl/día a 76 kbbl/día.
De esta forma, la participación de la CGSJ se redujo en un año del 61 al 25%, mientras que la cuenca neuquina (Vaca Muerta) pasó del 24% al 65%.
Consecuentemente los ingresos por dichas exportaciones se redujeron en San Jorge y subieron para Neuquén. El primero bajó de USD 588 millones a USD 361 millones, mientras que la segunda subió de USD 785 millones a USD 881 millones.
Cabe remarcar que la variación en dinero no es consecuente con la del volumen exportado y esto está relacionado, en forma directa, al precio que tuvo en ese período de tiempo el crudo a nivel internacional.
Impacto en la balanza energética
A la hora de mirar la balanza energética, la misma si bien terminó con déficit tanto al observar el mes de mayo en sí mismo como el acumulado de los primeros cinco meses del año, el mismo fue muy inferior al observado un año antes.
En lo que hace al mes de mayo, este terminó con una balanza energética negativa de USD 461 millones. En igual mes del 2022, ese número en rojo había tocado los USD 1.054 millones.
La diferencia se agiganta mucho más al comparar los acumulados. De enero a mayo de 2022, el déficit de la balanza energética alcanzó los USD 1.422 millones. En aquel momento se vivía a pleno el impacto de la guerra con Ucrania, que llevó el costo de la energía a precios exorbitantes. Este año el rojo acumulado de enero a mayo fue apenas de USD 222 millones.
Esta reducción no sólo se produjo por el precio pagado, sino también en términos del volumen importado. A diferencia de lo que pasó con las exportaciones, cuyo valor se mantuvo, prácticamente, constante en forma internaual. El acumulado 2022 fue de USD 3.234 millones y un año después de USD 3.233 millones.
En el caso del petróleo, si bien las cantidades exportadas se incrementaron en un 17% respecto de 2022, el precio se redujo en un 9%, lo que derivó en una cifra final, prácticamente, igual de un año al otro
Fuente: La opinion autral