El lunes habrá una reunión definitoria. Si no acuerdan una suba, el martes habrá cese total unidades de corta y media distancia. La lucha por lo subsidios
Martes 13, no te cases ni te embarques… y ni se te ocurra viajar en colectivo o micro, porque la Unión Tranviarios Automotor (UTA) anunció un cese de actividades por 24 horas a nivel nacional en el servicio de corta y media distancia, ante la falta de acuerdo salarial. Hasta el momento, las negociaciones se encuentran estancadas. Sin embargo, queda una bala de plata, que será la reunión del próximo lunes entre funcionarios, el gremio y empresarios; aunque las fuentes consultadas son pesimistas sobre la posibilidad de una solución.
El último encuentro entre las partes -que se llevó a cabo el jueves en dependencias del ministerio de Trabajo- estuvo signado por el fracaso. En la reunión, los empresarios del transporte mostraron gráficos y datos sobre los costos vigentes y reiteraron que es imposible hacer frente al reclamo salarial de la UTA.
Como una especie de bucle, los patrones sostienen que para pagar una mejora salarial solo hay dos alternativas: Subir las tarifas o que se mejoren los importes de los subsidios, en tanto el Gobierno ya corrigió el tarifario y sostiene que no puede incrementar los subsidios.
Paro de UTA: cuánto quieren ganar los choferes de colectivos
El consejo directivo de la UTA, por su parte, ratificó su propuesta de recomposición salarial y anticipó que si para el lunes 12 no hay una oferta concreta, a partir de la 0 hora del martes paralizará los servicios por 24 horas y no descarta profundizar la medida de fuerza en forma inmediata.
El reclamo del gremio consiste los siguientes salarios básicos:
- Abril: $262.000
- Mayo: $284.000
- Junio: $320.000
- Julio: $348.800
- Agosto: $380.192.
- Septiembre: $414.409
Hasta el momento, la intervención del ministerio de Trabajo fue esencial para que el conflicto se mantenga en su cauce, a fuerza de diálogo y la aplicación de la conciliación obligatoria que, justamente, vence el lunes por la noche, por lo que el gremio está habilitado para aplicar las medidas de fuerza que crea conveniente.
El secretario General de la UTA, Roberto Fernández, reafirmó: “Si para el lunes no recibimos una respuesta salarial conforme el pedido formulado en la audiencia anterior, se realizará un paro general del transporte de pasajeros de corta y media distancia en todo el país por 24 horas” y disparó: “Nos desafían y nos obligan a realizar la medida de fuerza por nuestro salario”.
Al respecto, explicó que la huelga “es empujada por quienes tienen la responsabilidad de solucionar la grave crisis en la que están poniendo al transporte, afectando a los 10 millones de usuarios diarios del AMBA y 9 millones en el interior del país”.
El gremio de choferes de colectivo cargó contra empresarios y funcionarios
Fernández reiteró que “los responsables de esta situación son el sector empresario, las máximas autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación y a los responsables del Transporte en las Provincias y el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, por la falta del acuerdo salarial”.
Al término de la última audiencia, representantes de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) indicaron que no se pueden “atender las demandas gremiales porque la situación no ha cambiado, debido a la falta de dialogo con el Ministerio de Transporte sobre el cumplimiento del marco normativo, que obliga a las autoridades a definir de qué manera cubrir el ajuste pedido” por los trabajadores.
Por su parte, desde el Ministerio de Transporte, a cargo de Diego Giuliano, le comunicaron al gremio que no tienen fondos para darle a las empresas, por lo que se viene demorando la actualización en la estructura de costos. Por eso, las patronales adelantaron que “no van a poder pagar” el incremento que reclama la UTA.
Empresas de transporte no pueden pagar: “O sube el boleto o más subsidios”
Voceros de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP) insisten en que no pueden pagar los salarios porque el Gobierno y las provincias no hicieron efectivas las compensaciones económicas a las empresas, pero además plantean la posibilidad de suspensiones del personal, retomar los recortes de frecuencias o en una interrupción del servicio interurbano de colectivos.
La FATAP, por su parte, aseguró que la Nación adeuda dos meses del pago de subsidios a las empresas del interior del país y confirmaron que frente a esta situación, “se cae el acuerdo salarial firmado con la UTA el 27 de febrero, que era hasta junio con un 29 por ciento de aumento por el primer semestre”. Desde la patronal argumentaron que “solo cuatro provincias cobraron este subsidio nacional hasta febrero”.
Según los datos del Índice Bondi, que publica mensualmente la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), el costo real del pasaje en colectivo es de 315,61, pesos, lo que arroja un total superior a los 77.400 millones de pesos por mes globalmente. Desde el Gobierno, reconocen 49.600 millones de pesos por mes entre lo que abonan los usuarios con las tarifas (28,79 pesos en promedio) y los subsidios. Además, en el sector privado aseguran que Nación, la Ciudad y la provincia de Buenos Aires tenían hasta mediados de mayo una deuda corriente de unos 23.000 millones de pesos.
La diferencia entre lo que no se recauda de tarifas (aproximadamente un 14 por ciento del total del ingreso) y subsidios (el otro 86 por ciento) son 27.700 millones de pesos o 113,15 pesos por cada pasajero, que las empresas computan como pérdidas pero en realidad es deterioro de calidad del servicio, menos frecuencias y demoras en la renovación de unidades por encima de los 10 años. Por esto los empresarios amenazan con el recorte de servicios y el despido de choferes.
Fuente: Iprofesional