La investigación sobre baterías revelada a principios de este mes de Tesla podría sugerir que la compañía está en camino de sacar al mercado una batería de un millón y medio de kilómetros.
Esta nueva batería podría durar tres veces más que las células actuales de Tesla – 6.000 ciclos, en un amplio rango de temperaturas – y ser la “salsa secreta” de la marca de coches eléctricos en su intento de demostrar que sus vehículos son bestias de alto kilometraje.
El trabajo fue presentado por el investigador pionero de baterías de iones de litio Jeff Dahm, y se centró en una nueva química de “hidruro metálico de níquel monocristalino (NMC)/grafito artificial.
Concluimos que las células de este tipo deberían ser capaces de alimentar un vehículo eléctrico más de 1,6 millones de kilómetros (1 millón de millas) y durar al menos dos décadas.
Los experimentos, en la Universidad de Dalhousie en Canadá, se llevaron a cabo en celdas tipo bolsas, con los autores advirtiendo que las pérdidas debidas al formato de la celda podrían no ser capturadas en los experimentos y análisis.
La investigación presentada en el artículo, publicado el 6 de septiembre en Journal of The Electrochemical Society, fue apoyada por Tesla Canada e incluyó años de pruebas, con ciclos de potencia de carga-descarga a 20, 40 y 55 grados Celsius.
Los investigadores observaron las necesidades de ciclos de batería más largos para los “taxis robotizados”, los camiones de largo recorrido y las aplicaciones de vehículo a red.
Elon Musk, director ejecutivo de Tesla, ha presentado los planes para el futuro de la empresa como operador de “taxis robotizados”, y señala que la tecnología hará que los coches sean más valiosos en el futuro.
Los investigadores descubrieron una penalización de por vida por la carga de alta tasa, aunque dijeron que se están considerando varios electrolitos diferentes para solucionarlo.
El anuncio de la investigación subraya lo que se conoce desde hace tiempo: que Tesla está trabajando para desarrollar sus propias baterías, independientemente de su antiguo socio Panasonic.
Lo que faltaba en el documento era cualquier mención a la facilidad de fabricación, así que lo que queda por ver es si estas sustancias químicas que se están considerando pueden hacerse en un volumen tan alto -y tan asequible- como las células actuales. Si esto sucede, Tesla podría explotar por delante de los demás una vez más.
Fuente: Ecoinventos