El sentimiento bajista rodeó la contracción de las importaciones de crudo por parte de China en enero y febrero.
“Dada la elevada inflación en Estados Unidos y Europa, la demanda de estos países debería seguir debilitándose, lo que también frena la demanda de procesamiento en China“, afirmó Iris Pang, economista jefe de ING para la Gran China.
“La incógnita clave para 2023 será la interrupción de las exportaciones de petróleo y productos refinados de Rusia“, comentó en una nota Vivek Dhar, analista del Commonwealth Bank of Australia.
Además, los inventarios mayoristas estadounidenses cayeron en enero en línea con las estimaciones iniciales, según datos del Gobierno publicados el martes, que también mostraron un repunte de las ventas de los mayoristas.
Fuente: Ambito