Con la iniciativa se busca aumentar la disponibilidad del combustible en un momento crítico para el campo. Destacan la señal, pero señalan que no resuelve el problema de base.
En la Argentina hay dos grupos de empresas que producen biodiesel: un sector de 28 pymes que abastece al mercado interno y otro grupo de grandes empresas que son exportadoras. Pero todas, por distintas razonas, tienen una capacidad ociosa cercana al 50%, por eso la medida fue muy bien recibida entre quienes le agregan valor al poroto de soja.
Desde la Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO), Luis Zubizarreta, Presidente de la entidad, aseguró a Ámbito que “es una buena medida. Tenemos una industria moderna y eficiente, contamos con la materia prima y podemos vender a precios competitivos respecto del gasoil importado. Rápidamente podremos hacer nuestro aporte”.
Juan Facciano, Presidente de la Cámara Santafesina de Energías Renovables (CASFER) aseguró a Ámbito que “ese 2,5% adicional nos aporta muchísimo. Cuando se votó la nueva ley y se bajó el corte del 10% al 5%, se generó una crisis en nuestro sector porque el negocio cayó un 50%. Esta nueva suba del corte eleva la capacidad de producción al 75% en términos históricos. Creo que además va a impactar en el sector exportador, porque cuando se produzca biodiesel para el mercado interno se reduce la salida de divisas por la importación de gasoil y al mismo tiempo se incrementa la posibilidad de exportar harina de soja, que es el principal producto con valor agregado que vende nuestro país al mundo”.
La decisión del Gobierno fue bien recibida pero nadie en el sector energético cree que esto vaya a solucionar la problemática, que es estructural, por lo tanto la importación de gasoil continuará.
Verónica Gesse, ex secretaria de Energía de la provincia de Santa Fe explicó a Ámbito que “es bueno que parte del Gobierno se desdiga de lo que se habló cuando se votó la nueva ley de biocombustibles. Eso es una buena señal, porque la crisis es real y las energías terminan presionando a la inflación”.
Fuente: Ambito