Hasta el viernes pasado el sector ingresó al mercado de cambios alrededor de u$s1.100 millones, lo que muestra una caída del 30% con respecto al mismo periodo del mes anterior.
En este punto en particular, los precios internacionales y los altos rindes que viene mostrando la cosecha son dos puntos a favor la economía argentina. Es que el trigo está cotizando en su mayor valor en nueve años, por arriba de los u$s300 por tonelada, mientras avanzan las cosechadoras en la zona núcleo arrojando buenos rendimientos por hectárea por lo que la producción estimada podría rondar las 20 millones de toneladas. De esta manera, las proyecciones indican que el cereal podría aportar entre u$s3.600 y u$s4.000 millones a la economía argentina, pero el mayor ingreso se concentraría en diciembre próximo.
En este contexto, desde la consultora económica Equilibra advierten: “Si bien el último bimestre la oferta de agro divisas se ubicará bien por encima de la de un año atrás, estimamos que caerá unos u$s720 millones respecto a los muy buenos registros del bimestre anterior. Esto significa que deberíamos ver una menor demanda en el mercado oficial para que no se incremente la tensión cambiaria”.
En tanto, si bien los volúmenes a exportarse en diciembre estarán apenas por encima a los del mismo mes del año anterior, los precios seguirán siendo favorables y por eso, la consultora proyecta un ingreso de otros u$s2.000 millones para el último mes del año.
Mientras tanto, otro punto a tener en cuenta es que este 2021 está rompiendo todo los récords en lo que respecta al ingreso de dólares del campo. Según detallan desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, dado el elevado ritmo registrado durante todo el año, la liquidación acumulada a octubre llega a u$s28.100 millones, récord que supera en un 67% al registro de 2020 y en un 26% al segundo máximo histórico de 2011.
De continuar con esta dinámica durante los próximos meses, el año cerraría con un ingreso de divisas en torno a los u$s32.500 millones, un valor récord que además podría volver a reflejarse el próximo año de la mano de los sostenidos precios internacionales. Dólares que serán fundamentales para la economía argentina siempre tan necesitada de divisas frescas.
Fuente: Ambito