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“Si los Gobiernos dicen que los motores de combustión interna son el enemigo, no podríamos producir casi ningún vehículo”, declaró.

El director ejecutivo de Toyota, Akio Toyoda, advirtió que millones de empleos en las automotrices podrían estar en riesgo si el gobierno japonés sigue adelante con su ambicioso impulso hacia la neutralidad de carbono.

Mientras Japón se propuso eliminar por completo las emisiones de gases contaminantes en los autos para 2050, Toyoda explicó que el cambio radical hacia los vehículos eléctricos podría paralizar la actividad industrial de la compañía.

“Japón es un país que depende de las exportaciones”, dijo Toyoda. “Por lo tanto, la neutralidad de carbono equivale a una cuestión de empleo. Los políticos están diciendo que tenemos que convertir todos los autos en vehículos eléctricos y que la industria es anticuada, pero no creo que este sea el caso. Para proteger los trabajos y las vidas de los japoneses, es necesario alinear nuestro futuro con los esfuerzos que hicimos hasta aquí”, agregó.

El CEO de Toyota dijo que los autos eléctricos podrían eliminar millones de puestos de trabajo

Según Auto News, Toyoda señaló que Japón produce alrededor de 10 millones de vehículos al año, de los cuales cerca del 50 por ciento se exportan. Los pronósticos predicen que el país asiático podría estar produciendo hacia 2030 ocho millones de vehículos anualmente con motores de combustión, incluidos híbridos y a hidrógeno, y eliminarlos por ley paralizaría el mercado laboral.

“Esto significa que se perdería la producción de más de ocho millones de unidades y la industria automotriz podría correr el riesgo de perder la mayoría de los 5,5 millones de puestos de trabajo”, argumentó Toyoda. “Si dicen que los motores de combustión interna son el enemigo, no podríamos producir casi ningún vehículo”, declaró.

Toyoda se mantiene firme en su creencia de que los vehículos híbridos siguen siendo una tecnología puente importante hacia los vehículos eléctricos y son particularmente importantes en mercados sin una infraestructura de carga considerable.

“Para lograr la neutralidad de carbono, el enemigo es el dióxido de carbono, no la combustión interna. Para reducir las emisiones de dióxido de carbono, es necesario contar con iniciativas prácticas y sostenibles que estén en línea con diferentes situaciones en varios países y regiones”, concluyó el directivo.

En la Argentina, por lo pronto, no se fabrica ningún vehículo eléctrico, pero el Gobierno ya envió al Congreso un proyecto de ley que propone, en su artículo 78°, la prohibición de la fabricación vehículos que funcionen propulsados exclusivamente por motor de combustión interna a partir del 1 de enero de 2041; es decir, en veinte años.

Es la primera vez en la Argentina que se pone fecha al fin de la producción de vehículos nafteros y diésel (comúnmente, a los segundos se los conoce como gasoleros), aunque todavía la misma deba ser ratificada en la dos cámaras.

 

 

Fuente: TN