Volkswagen presentó el nuevo Polo GTi, que subió la potencia y sumó asistencias a la conducción

Volkswagen presentó el rediseño del Polo GTi, la versión más picante de su hatchback compacto, que se suma a la nueva gama revelada en abril con las variantes “convencionales”. Cuenta con novedades estéticas, agregados de equipamiento y trabajos específicos en el motor para aumentar la potencia.

El nuevo Volkswagen Polo GTi conserva el motor naftero 2.0 litros turbo de la generación anterior, pero subió la potencia de 200 a 207 caballos y alcanza ahora los 320 Nm de par máximo. Combinado con una caja automática DSG de siete relaciones y con un sistema de tracción integral que incluye bloqueo de diferencial, acelera de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y roza los 240 km/h de velocidad máxima.

Está equipado de serie con un tren de rodaje deportivo llamado Sport Select. Con él, el conductor puede configurar de dos modos distintos el sistema de amortiguación. Incluye, entre otras cosas, una barra estabilizadora más grande en el eje delantero, bieletas de acoplamiento más rígidas en la parte delantera y cojinetes guía del eje más rígidos en la parte trasera, además de los amortiguadores conmutables.

También se puede elegir el modo de conducción (Eco, Individual, Normal y Sport son los disponibles) para ajustar la dirección, las características del motor y la gestión de la electrónica de la caja de cambios. Con los modos Sport e Individual, el sonido del escape se modifica automáticamente.

En el modo Eco, la gestión del motor, el aire acondicionado y otros grupos mecánicos auxiliares se controlan de forma óptima con el consumo. En este modo, el cambio de doble embrague DSG permite una función de desplazamiento por inercia: si el conductor levanta el pie del acelerador (por ejemplo, en tramos con pendiente) el cambio de doble embrague DSG se desconecta y el motor circula en punto muerto, explican desde la marca alemana.

Volkswagen asegura además que el bloqueo del diferencial XDS perfecciona el comportamiento de la tracción, ya que controla la presión de frenado de la rueda delantera interior en las curvas y así evita que gire y que el vehículo se descontrole en situaciones extremas.

El nuevo Polo GTi es 1,5 centímetros más bajo en relación con el Polo “convencional” (1,43 metros), aunque conserva la longitud de 4,07 metros y la anchura de 1,75 metros. Se distingue por los legendarios distintivos del GTI, como la franja roja en la parrilla del radiador, la estructura de panal de abeja de la rejilla de ventilación y los asientos deportivos con el característico diseño de cuadros “Clark” en las bandas centrales de los asientos. Las llantas pueden ser de 17 o 18 pulgadas, en ambos casos con pinzas de freno de color rojo.

Una de las particularidades es que incorpora el IQ.DRIVE Travel Assist, un paquete que agrupa distintas asistencias a la conducción para acelerar, frenar y actuar sobre el volante a velocidades de hasta 210 km/h. Además, viene con un instrumental totalmente digital de 10,25 pulgadas y una pantalla táctil central de 8 pulgadas, que opcionalmente puede ser de 9,2 pulgadas.

Su lanzamiento en la Argentina no fue confirmado. De llegar, lo hará importado de España (allí se fabrica) con un precio elevado por estar castigado con el impuesto extrazona, aquel que aplica para todos los autos que no llegan procedentes de países con los que existe un acuerdo de comercio bilateral.