La ronda complementaria organizada hoy por el Mercado Electrónico del Gas (Megsa) tuvo propuestas por apenas 11 millones de metros cúbicos por día. El precio negociado es levemente inferior al del mes pasado.
Una nueva subasta para el aprovisionamiento de gas natural destinado a las centrales térmicas del país como complemento a la base que fijaron los contratos del Plan Gas Ar mostró hoy una caída de más del 15% en los volúmenes ofertados por las productoras.
Esta mañana se realizó a través del Mercado Electrónico del Gas (Megsa) la subasta del gas complementario que utilizarán las usinas durante abril, con el resultado final de 9 ofertas por un total de 11 millones de metros cúbicos por día.
Este volumen es el más bajo que han registrado estas subastas, ya que el mes pasado la ronda cerró con 13 millones de metros cúbicos ofrecidos y en la primera subasta de este tipo, realizada en enero, las ofertas habían sido de 14,4 millones de metros cúbicos.
Al igual que en las anteriores subastas, el sistema contempla un precio tope, por lo cual el valor promedio ponderado de esta subasta fue de 2,60 dólares por millón de BTU, un centavo menos que el mes pasado.
Estos precios topes chocan contra los precios más elevados, en torno a los 3,50 dólares por millón de BTU, que contempla el Plan Gas Ar y son una las razones centrales por las cuales hubo escasas ofertas.
Es que desde las productoras no solo se advierte que, pese al lanzamiento del plan de incentivos la generación ha seguido bajando, sino que además ante la escasa oferta y el mayor precio del Plan Gas Ar es posible que encuentren mucho mejores precios en ventas spot.
Esta subasta apunta a completar la oferta de gas para las usinas generadoras de energía eléctrica, dado que un grueso de sus necesidades ya fue contractualizado con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) en la ronda 1 del plan de incentivos.
De todas formas, el panorama no es demasiado alentador para los meses del invierno por venir, cuando estima que la menor producción de gas hará que las centrales deban recurrir al uso de energéticos como el fuel oil, gasoil o el cabón, ante la falta de gas natural.
Fuente: Rio negro