Las transferencias para gastos corrientes aumentaron un 99,6% entre enero y octubre del año pasado. El congelamiento de tarifas y la corrida del dólar fue el principal motivo.
La decisión de mantener las tarifas congeladas sumada a la corrida de dólar obligó al Estado nacional a duplicar los recursos que destinó para cubrir el costo de energía durante los primeros 10 meses del 2020. Tomando la cotización del dólar mayorista promedio del período mencionado, los subsidios alcanzaron los 5.124 millones de dólares y se estima que terminaron el año en el orden de los 6.000 millones de dólares.
En detalle, las transferencias para gatos corrientes aumentaron un 99,6% entre enero y octubre del año pasado. Esto implica mayores subsidios por la suma nominal de 177.772 millones de pesos, mientras que el total alcanzó los 356.331 millones de pesos.
Así lo indicó el último informe del Instituto Mosconi, que lidera el exsecretario de Energía, Jorge Lapeña, que tomó datos de la Asociación Argentina de Presupuesto Público (ASAP).
Las ejecuciones presupuestarias más sustanciales fueron para la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) que alcanzaron los 262.366 millones de pesos, o 3.772 millones de dólares, y representó el 73% de las transferencias. Además este monto significa que se envió un 163,7% más a nivel interanual.
Un par de escalones más abajo, pero, en segundo lugar, se ubicaron las transferencias a IEASA, la exEnarsa, que recibió del Estado unos 46.526 millones de pesos, o 669 millones de dólares. A nivel interanual el incremento registrado es del 7,8%.
El podio de las transferencias del Ejecutivo nacional lo completó lo destinado para el plan de incentivos la producción de gas (Resolución 46), el plan gas de la gestión de Mauricio Macri. Para este programa se enviaron unos 25.231 millones de pesos, o 362 millones de dólares, con un incremento del 43,9% a nivel interanual.
“Esta dinámica en el comportamiento de los subsidios a CAMMESA a partir del abril responde a las crecientes necesidades financieras derivadas principalmente entre la brecha de costos crecientes, aunque estables por la pandemia y precios congelados”, dice el informe de Mosconi.
Fuente: Rio negro