Las transferencias para gastos corrientes se incrementaron un 100% en el acumulado anual a septiembre de 2020. Como suele suceder, Cammesa concentró la mayor parte de las ejecuciones presupuestarias.
Entre agosto y septiembre de 2020 el Estado destinó unos 1.000 millones de dólares en subsidios a la energía y en el acumulado anual al noveno mes del año la cifra rozó los 5.000 millones de dólares. Una vez más la millonaria suma acumulada responde a las maniobras que implementó el gobierno nacional por la brecha existente entre costos crecientes de la energía y el congelamiento de tarifas que arrancó en abril del 2019 con la administración nacional anterior y continuó bajo la gestión de Alberto Fernández.
Respecto al mismo período conjunto del año anterior, las transferencias para gastos corrientes registraron un salto del 100%, lo que implica mayores subsidios por 165.911 millones de dólares. En otras palabras, lo destinado el año pasado fue de 165.976 millones de pesos y este año se duplicó.
El monto total que se destinó para los subsidios a septiembre pasado es de 331.887 millones de pesos que si se toma la cotización del dólar mayorista en cada mes se traduce en 4.917 millones de dólares. Los datos se desprenden del último informe instituto Mosconi (IAG) que tomó datos de la Asociación Argentina de Presupuesto Público (ASAP).
Como ya se mostró en los meses anteriores, las ejecuciones presupuestarias más grandes fueron destinadas a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa). En segundo lugar quedó IEASA, la exEnarsa, y el podio lo completó lo transferido para el plan de incentivos la producción de gas (Resolución 46).
En detalle, Cammesa se llevó durante el año unos 242.366 millones de pesos, o 3,591 millones de dólares, lo que significa un incremento interanual del 171% y ocupó el 73% de las transferencias totales. A IEASA se le transfirieron unos 46.526 millones de pesos, o 689 millones de dólares, con un incremento del 9,2% interanual y, por último, para cubrir los gatos del Plan Gas de la gestión de Mauricio Macri se destinó un total de 21.970 millones de pesos, o 325 millones de dólares, con un incremento del 30,7%.
Más abajo en el ranking de subsidios quedó lo que destinó el Estado para el fondo para consumo de GLP y red de gas natural que acumula transferencias por 6.561 millones de pesos con un incremento de 17,9% interanual. Muy de cerca se ubicó lo que el gobierno le dio a Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), que tiene al exjefe de Gabinete Aníbal Fernández como interventor, con transferencias por 4.750 millones de pesos y registra un aumento del 7856,4% y es que en los primeros nueve meses del 2019 solo se enviaron unos 60 millones de pesos.
La Entidad Binacional de Yacyretá (EBY) se ubicó debajo con envíos por 3.367 millones de pesos (un 1,6 más) y luego lo que se utilizó como compensación para las distribuidoras de gas con 1.217 millones de pesos. El informe del Mosconi también indica que hay transferencias por 5.128 millones de pesos a otros beneficiarios sin discriminar.
Por último, las transferencias para gastos de capital acumuladas a septiembre fueron de 7.328 millones de pesos, lo que implica un salto del 32% respeto al año pasado o unos 1.776 millones extra. IEASA impulsó este segmento con mayores envíos por 53,8% o 1.980 millones de pesos.
Septiembre terminó de mostrar la tendencia que se venía viendo desde hace meses y era que durante el 2020 se iban a duplicar las transferencias para gastos corrientes y es lo que sucedió. Aún con tres meses por registrar lo más probable es que se continúe la misma senda, aunque con un nivel un poco más desacelerado.
Fuente: Rio negro