Es la versión más picante del modelo. Se ubica por encima del GTI.
La variante más esperada por los fanáticos del Volkswagen Golf está lista: se llama R y es la opción más radical del hatchback más exitoso de la marca alemana. Su motor entrega 320 caballos de fuerza y al igual que su antecesor, la tracción es integral a las cuatro ruedas.
El nuevo Golf R se ubica en lo alto de la gama y por encima del GTI. Con esa potencia, se mide con rivales como el Audi S3, el BMW M135i y el Mercedes-AMG A 35, solo por mencionar a otros de marcas alemanas.
El motor del R es un cuatro cilindros 2,0 litros turboalimentado, con inyección directa y distribución variable. Se asocia a una caja automática secuencial de siete marchas con opción manual desde levas al volante.
Así, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos, mientras que la velocidad máxima está limita a 250 km/h. Si se opta por el paquete R-Performance alcanza, en cambio, los 270 km/h.
Una de las grandes novedades está en la tracción, con un diferencial trasero autoblocante de tipo vectorial. El mismo permite trasladar toda la fuerza que llega a una rueda o a la otra. Eso le permite ser mas eficiente en todo tipo de curvas.
El Golf R tiene cuatro modos de conducción: Comfort (suspensión con una puesta a punto más suave), Sport (más rígida), Race (para máximo desempeño deportivo) e Individual (lo configura el conductor a gusto).
Pero además, quienes opten por el paquete R-Performance, podrán disfrutar de dos modos extra: Special y Drift. El primero está diseñado específicamente para girar en Nürburgring, el mítico trazado alemán. Para eso adapta caja, tracción y suspensión. El segundo permite deslizamientos-siempre en un lugar cerrado a público- ya no para girar más rápido, sino para divertirse.