Después de la baja temporal de retenciones se especula con una mayor liquidación por parte de las empresas a partir de esta semana. El Gabinete económico busca plantear una agenda de trabajo con representantes del sector primario y de la industria. El impulso de una ley marco, en el temario.
Por supuesto que la liquidación de divisas continúa siendo la gran preocupación del Gobierno. El acumulado a septiembre suma alrededor de u$s15.133 millones, lo que representa un retroceso interanual del 12,68%. Es cierto también que las cerealeras y los productores se apuraron a liquidar parte de su cosecha luego de las elecciones de agosto 2019. El sector intuía un incremento en las retenciones y por eso se apuró a vender de manera anticipada la soja de la campaña 2019/20. Pero también este año se desarrolló otro fenómeno que complicó la liquidación de divisas: la primarización de las exportaciones y por eso Guzmán apostó nuevamente al diferencial de retenciones.
En este marco, mañana el Gobierno buscaría en la reunión con el CAA no solo entablar un canal de diálogo fluido sino también plantear algunas medidas concretas que el sector agroindustrial viene reclamando desde hace larga tiempo. Sigue bajo análisis la baja de retenciones a la carne y algún tipo de modificación en la rebaja de retenciones para incluir los granos de la cosecha 2021.
Mientras tanto desde el CAA siguen sumando entidades bajo su paraguas. Hoy son en total 57 y a pesar de la polémica, tanto Federación Agraria, como Coninagro y CRA, continúan bajo la órbita de esta flamante coalición que busca hacer historia en el agro argentino con la puesta en marcha de una ley marco. El interrogante es si lo logrará finalmente de la mano del Gobierno de Alberto Fernández, las cartas están echadas y la reunión de mañana sea quizás el inicio de esta nueva etapa.