La compañía informó que su CapEx no superará los 25.000 millones de dólares el próximo año. No afectará producción, pero si retrasará proyectos nuevos.
La compañía petrolera estatal de Arabia Saudita planea reducir su CapEx, o gasto de capital, al 50% para el próximo año, lo que marca un techo de 25.000 millones de dólares.
El recorte de Saudi Aramco va más allá de las estimaciones conservadoras para el precio del petróleo en el mediano plazo y tiene que ver con lo que debe pagar a sus accionistas, que alcanza los 75.000 millones de dólares, y lo poco recaudado este año por el coronavirus y la guerra de precios.
Si bien el recorte sería importante, no significa que perdería nivel de producción y es que gran parte del CapEx de la compañía está destinado a nuevos proyectos lo que se retrasarán.
Esto significa que la firma con sede en Dhahran puede mantener sus gastos a un nivel similar, al menos, hasta el 2023 sin tener un impacto sustancial en sus rindes.
“Hemos puestos en revisión nuestros gastos de capital para el 2021 y los años venideros. Analizamos los proyectos futuros en base a objetivos estratégicos, operativos, comerciales y financieros”, indicó el presidente de la compañía, Amin Nasser, en la presentación de resultados.
A principios de esta semana, la compañía le presentó un plan de pago a sus accionistas para cumplir con la deuda de 75.000 millones que sería en varios años.
La buena posición de la compañía le permite reducir fuertemente su CapEx sin afectar la producción e incluso aumentarla si la demanda tiene un repunte importante.
Fuente: Rio negro