El gobernador Perotti habló con UNO Santa Fe y dijo: “Sin la intervención de la Nación no veo una alternativa”. Además, se refirió a los dichos del Presidente
El gobernador de la provincia, Omar Perotti, recibió a UNO Santa Fe
en Casa de Gobierno para hablar sobre Vicentin. A 24 horas de los dichos del presidente, Alberto Fernández, quien dijo que se equivocó con el anuncio de la expropiación y un día antes del encuentro entre la provincia y los directivos de la empresa de Avellaneda al que convocó el juez que dirige el concurso, Fabián Lorenzini, el mandatario santafesino pidió no perder de vista que lo importante es que la empresa Vicentin no quiebre.
Al ser consultado sobre los dichos del Presidente, Perotti dijo: “Tuve la oportunidad de hablar varias veces con él a partir de la necesidad que tenía la provincia de encauzar una solución en el marco del concurso. Ahí uno tenía claro que su objetivo (el de Fernández) era el rescate y el análisis que él incorporó son las formas, la oportunidad o el cómo. Pero lo que no cambió nunca es su compromiso por rescatar una empresa que tiene clara la importancia en el quehacer económico de la provincia, de la Nación y de su potencial exportador.
—¿De esta manera queda descartada la expropiación?
—La instancia que él definió a través de un DNU (Decreto de Necesidad y Urgencia) y su posterior expropiación, cuando ese DNU deje de estar, será el momento donde no esté más la posibilidad de la expropiación. Lo que siempre planteó es que aceptará y que quería que le acercaran opciones superadoras. Se lo pidió a la empresa y nosotros mismos tomamos como una opción el trabajo en el concurso, que es lo que estamos haciendo a través de la Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ). Lo hacemos con el interés real y concreto de Santa Fe sobre una empresa santafesina que queremos que se recupere, que siga estando en la provincia y que siga teniendo el impacto y el acompañamiento a distintos sectores productivos. Cualquiera de estas instancias, que sentimos que tiene que ser exitosa y que permita el rescate, es la que va a alejar definitivamente cualquier instancia.
“Lo que tenemos que tener en claro –continuó Perotti– es que hay que trabajar para rescatar a la empresa. Hoy está bajo la conducción de sus administradores y no se visualiza una instancia de salida concreta. Entonces, la intervención del Estado, y este es el tema central que uno ve es la preocupación del Presidente y su deseo, es que esta empresa no quiebre, no desaparezca”.
“Tiene claro por los números, por la evaluación hecha sobre una empresa con un pasivo de 1.500 millones de dólares, que la única forma de ponerla en marcha es con la intervención del Estado, juntándose con algunos acreedores importantes y consiguiendo el acompañamiento de los acreedores financieros a un proyecto diferente. No hay dudas que esa es su preocupación, la misma que tenemos en la provincia y por eso buscamos un trabajo conjunto”, agregó Perotti.
—Pero por las palabras del Presidente parece que quedó definitivamente relegada la posibilidad de la expropiación, ¿usted lo ve así?
—Cuando nosotros hacemos la presentación lo conversamos con él. Cuando planteamos que dentro de nuestros interventores de la IGPJ había dos personas propuestas por Nación, eso tiene el claro objetivo de trabajar juntos y de sostener el compromiso del presidente en acercar recursos a través de esas dos personas que entendemos que son de su confianza como para llevar adelante el proyecto de inyección de recursos en el rescate de Vicentin.
—¿Los empresarios de Vicentin se están dejando ayudar?
—Nosotros planteamos que en la instancia del concurso hay que tener la posibilidad concreta de generar un fideicomiso que resguarde los intereses de los acreedores y de los accionistas. La administración de la empresa pudo generar opciones durante todo este tiempo, pero no las hemos conocido. Creo que hay una dificultad real, concreta y por eso le pedimos intervención al juez. Mañana (por este miércoles) hay una instancia que ojalá abra un espacio en esa dirección para poder ponernos a trabajar lo antes posible en la conformación de un fideicomiso que pueda reunir a los acreedores, que pueda entusiasmar a quienes tienen que ser los futuros originadores de granos para una empresa de esta envergadura, que contenga las aspiraciones de un futuro mucho más halagüeño para los trabajadores que hoy ven un horizonte muy corto con los alquileres o con alguna instancia de fasón que es con lo que se está manteniendo por un tiempo más, no sabemos cuánto más, la posibilidad de continuar. Allí los accionistas tienen posibilidad de formar parte, el concurso no excluye a nadie. Y si hubo un planteo nuestro de intervención en el concurso es porque vemos que ahí hay una posibilidad concreta de trabajo para rescatar la empresa
—¿Qué lectura hace de las marchas que hubo el 9 de Julio?
—Creo que cada uno tiene el derecho a manifestarse y de acuerdo a cada lugar donde hubo una marcha hay una connotación diferente de esa expresión. Me parece que hay distintas motivaciones en cada uno de los lugares. Yo siempre voy a estar a favor de que cada uno que quiera manifestarse lo pueda hacer, con respeto, con libertad y, en ese sentido, lo que uno tiene claro es que el objetivo central es cómo tenemos una estrategia real y concreta para salvar la empresa. A la empresa no la salvamos con discursos, se requiere de otras cosas, de conformar un espacio con una herramienta que puede ser el fideicomiso que vuelva a restituir confianza que genere la expectativa de aquellos acreedores que para cobrar tienen que volver a poner en marcha la empresa; el compromiso de los trabajadores; que los acreedores financieros nacionales e internacionales acuerden en una instancia que les permita ir cobrando a futuro. Y el que tiene la capacidad de articular porque puede inyectar recursos o que puede acercar a alguien que es muy cercano al sector, como es YPF Agro es el gobierno nacional. Creo que ahí hay una posibilidad importante de rescatar la empresa y hay que hacerlo cuanto antes.
“El tiempo juega en contra de la empresa, de la posibilidad real y genuina de poder continuar con la actividad y eso es lo que nos preocupa. La mayor preocupación de todos es la de la quiebra de la empresa. A partir de la coincidencia de que no queremos eso y seguramente todos los actores no quieren que eso ocurra hay que analizar las herramientas. Mirar de afuera y criticar al que hace algo no es el camino. El camino es tratar de tener una herramienta para que la Nación esté colaborando, esté acercando recursos y de allí la importancia de que el Presidente sea el que tiene este compromiso”, aseguró Perotti.
—¿La provincia no tiene la posibilidad de jugar ese rol?
—La provincia no tiene los recursos para intervenir. Somos acreedores, pero no somos de los principales. Estamos hablando de un pasivo de 1.500 millones de dólares. Ojalá la provincia estuviese en condiciones de hacer un aporte a tamaña deuda o poder hacer un aporte de un porcentaje de tamaña deuda para poder poner en marcha una empresa de estas características. Como no tenemos esa posibilidad, lo que sentimos es que Nación es la que nos puede estar ayudando a inyectar esos recursos que son los que nos pueden ayudar a que los pequeños productores puedan cobrar, que las cooperativas puedan saber que hay alguien que compra que vuelve a reconstruir confianza sobre esa empresa y que paga. Esto es lo principal. Sin la intervención de la Nación no veo una alternativa. Pero partamos de esto: fue la misma empresa la que fue a pedir que YPF se haga cargo e YPF es el Estado. Partimos de algo que no tenemos que olvidar y es que los empresarios le dicen al presidente que sabían que el 4 de diciembre habían perdido la empresa. Le dijeron: “Perdimos la empresa cuando no le pagamos a los productores, cuando no le pagamos a los bancos. El que perdió la confianza está fuera de este negocio, nosotros estamos afuera y por eso queremos que YPF se haga cargo”. Esto es que el Estado se haga cargo, intervenga, ayude y nosotros, desde la provincia tomamos un rol de articulación entre el Estado y la definición del presidente de ser parte en el rescate para tratar de canalizarlo junto a los principales acreedores en una propuesta que en el marco de un concurso el juez apruebe.
Fuente: Uno santa fe