El gerente de Operación y Mantenimiento de no convencional de YPF, Juan Manuel Ardito, explicó cómo se opera de manera remota desde Neuquén capital
Hasta principios de marzo, Juan Manuel Ardito, gerente de Operación y Mantenimiento de No Convencional de YPF, cumplía su rutina. Bien temprano por la mañana salía a recorrer el campo de Loma Campana, el mayor campo de petróleo en Vaca Muerta, para relevar información sobre las instalaciones y pozos del yacimiento.
Sin embargo, como consecuencia del aislamiento obligatorio que decretó el Gobierno nacional ese recorrido en vivo y en directo se volvió imposible. Aun así, la producción del reservorio no perdió el ritmo y a través de una sala de control plagada de pantallas, computadoras y tableros de comando, el equipo que lidera Ardito cambió sus hábitos de trabajo, pero mantuvo su nivel de eficiencia.
“Estamos operando Loma Campana desde la base de YPF en Neuquén capital, a más de 100 kilómetros de distancia de Loma Campana”, afirmó y destacó la importancia de la tecnología y los sistemas digitales de comunicación para sortear escenarios por demás inéditos e impredecibles. Mientras la cuarentena exige tomar distancia, la informática rompe el cerco y hace posible, en tiempos de virus, la operación virtual del yacimiento de explotación de shale oil más importante del país.
Es un logro impensado hasta hace un par de años atrás. YPF monitorea en tiempo real el funcionamiento de pozos, facilities, baterías y plantas de tratamiento. Mide distintas variables, presión, temperaturas, caudales.Con apenas una guardia mínima de personal humano en el yacimiento para responder sólo ante emergencias, la petrolera controlada por el Estado es capaz de seguir extrayendo y procesando hidrocarburos desde el yacimiento no convencional.
Transformación digital
En charla con el sitio Econojournal, Ardito contó que “la principal transformación tiene que ver con priorizar el factor humano. Hoy lo principal es cuidar a la gente. Hay pocas personas trabajando en el campo. La mayoría está en las bases operando de manera remota la ubicación y funcionamiento de instalaciones de baterías, los sistemas de alarmas, las mediciones de presión y temperatura y el análisis de datos en general.”
“Nuestro principal objetivo es tener todos los equipos de trabajo en condiciones para llevar adelante los próximos planes de producción. Por otro lado, la eficiencia tecnológica es fundamental para el seguimiento a distancia. Realmente estamos preparados para abordar este contexto”, afirmó el técnico.
Con respecto a experiencias de trabajo remoto, Ardito declaró que ya lo habían hecho “en situaciones de contingencia, pero nunca por tanto tiempo de manera ininterrumpida. Nos veníamos preparando para que el equipo de trabajo esté entrenado para enfrentar situaciones de este tipo. Desde hace años hacemos pruebas para operar plantas y baterías a distancia para probar la confiabilidad de la tecnología en la operación de instalaciones.”
“En situación de normalidad trabajan alrededor de 17 personas (tres jefes de producción, 10 supervisores, un jefe de planta y otros técnicos). Hoy hay seis, esto quiere decir que lo hemos reducido al mínimo. En total, en Loma Campana hoy (en la primera semana de abril) concurre físicamente apenas un 10% del personal que había hasta que empezó la pandemia. Y ahora no bajamos ni un metro cúbico (a mediados de mes, YPF tomó la decisión de frenar un 50% la producción del campo por la caída de la demanda)”, declaró el gerente.
La apuesta de YPF en materia de tecnología, automatización, digitalización y confiabilidad de los sistemas de comunicación se evidencia en la actualidad como una herramienta central para operar los yacimientos. En 2016 la petrolera estatal instaló salas de control en Vaca Muerta y en 2018 inauguró un espacio destinado específicamente a la geonavegación, un procedimiento que consiste en registrar las propiedades de las rocas en tiempo real.
El diseño de los algoritmos corrió por cuenta de Y-TEC, la empresa de investigación y desarrollo tecnológico para la industria energética más importante del país. La inversión en tecnología habla de un cambio de paradigma a la hora de pensar la operación de los campos. La digitalización no solo brinda la posibilidad de predecir eventos sino que además, en momentos de crisis, permite monitorear, supervisar y hasta operar el desarrollo de forma remota.
Respecto a la consulta de si lo que hacen hoy a nivel tecnológico se hubiera podido hacer hace 5 años, Ardito aseguró que “hoy hay otro alcance. Si esto ocurría antes probablemente no hubiéramos podido trabajar con estos niveles de respuesta. En ese sentido es evidente que maduramos mucho. En 2016-2017 realizamos una inversión muy fuerte para avanzar en materia de digitalización de Loma Campana. Desde entonces fuimos avanzando en la optimización y desarrollo de sistemas (en especial con Y-TEC) que permitan mejorar la gestión de alarmas y manejo de información. ”
Fuente: Iproup