La estructura se ubicaba en Monseñor Zabala y Berutti. Implicaba un riesgo estructural y de seguridad para los vecinos. Además, era utilizada como escondite para el consumo de sustancias.
El Municipio, a través de la secretaría de Seguridad y en un trabajo conjunto entre Defensa Civil y el Emvial, demolió una estación de servicio abandonada en Monseñor Zabala y Berutti, que representaba un riesgo estructural para los vecinos de la zona y era foco de actividades peligrosas, tales como el consumo de sustancias y pernocte.
“A raíz de reiteradas denuncias de vecinos sobre la presencia de personas en situación de calle que frecuentaban el lugar y provocaban robos e incendios, decidimos intervenir. Establecimos un acuerdo con YPF, que cubre los costos de la intervención”, comentó Alfredo Rodríguez, director de Defensa Civil.
Y agregó: “La estructura estaba en muy mal estado y, debido a sus dimensiones, estamos trabajando en su demolición y limpieza, un proceso que llevará varios días. De esta forma, brindaremos tranquilidad a los vecinos y dejaremos un espacio seguro para la circulación en el barrio”.
Durante este año, se realizaron operativos similares, como el retiro de vehículos abandonados en la vía pública y la remoción de estructuras irregulares en espacios verdes, promoviendo la seguridad en distintos barrios de la ciudad. En este caso, tras una autorización de YPF, propietaria del espacio, se obtuvo el permiso para demoler la estructura en estado de abandono.
Para esta tarea, se emplearon una retroexcavadora y una pala mecánica del Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado, con apoyo de personal de Defensa Civil, quienes delimitaron la zona para impedir el ingreso de personas ajenas al lugar. Sin embargo, el proceso de demolición tomará aproximadamente dos días debido a la extensión del espacio, tras lo cual el Emsur se encargará de la limpieza y el retiro de escombros, asegurando un entorno más seguro para los vecinos.