Weretilneck ya adhirió al régimen de incentivos. Buenos Aires podría suscribir a través de proyectos presentados por la oposición.
Son jugadas pensadas. Movimientos delicados. En juego está nada menos que una inversión de 30.000 millones de dólares que podrían recaer o en la provincia de Buenos Aires, o en Río Negro.
La definición llegará en los próximos días. Por lo pronto, Alberto Weretilneck movió rápido y ordenó a la Legislatura de Río Negro avanzar con la adhesión al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), un trámite que -de acuerdo al presidente de YPF, Horacio Marín- es indispensable para definir la locación de la planta de GNL que construirá la petrolera malaya Petronas.
Kicillof juega distinto. El gobernador de Buenos Aires ya planteó su rechazo al régimen incluido en la Ley Bases. “Es una cesión de soberanía clara y evidente. Están dando más de lo que piden. Es una promo. Un 2×1”, dijo.
Según pudo saber LPO, Kicillof esperará a que YPF se pronuncie respecto de dónde se ubicará la planta de GNL y en caso de que ese lugar sea Bahía Blanca, pedirá unos días para adherir al RIGI.
Buenos Aires no necesariamente tiene que adherir a través de una iniciativa del Ejecutivo. La oposición ya envió varios proyectos a la Legislatura como una forma de presión para que Kicillof adhiera. Si uno de esos proyectos se aprueba en el recinto será suficiente.
Por lo pronto, trascendió que YPF no seguirá presionando a la provincia hasta tanto no haya una definición sobre la locación definitiva. La entrevista de Marín con Carlos Pagni en la que el funcionario condiciona la ubicación de la planta de GNL a la adhesión al RIGI, generó revuelo en todo el sector energético.
Esta semana el presidente de la petrolera con mayoría estatal estuvo en el puerto de Bahía Blanca. En esa ciudad del sur de la provincia se leyó esa visita como un guiño importante de cara a las definiciones que vendrán.
Desde que Marín abrió la puerta a la posibilidad de llevar la planta de GNL a Río Negro, en Bahía Blanca se encaró un trabajo serio, ajeno a cualquier posicionamiento ideológico. El intendente, Federico Susbielles, buscó dejar en claro en todos los ámbitos que esa ciudad del sudoeste de la provincia tiene las mejores condiciones para el proyecto de Petronas y la socia local, YPF.
La ciudad cuenta con un polo industrial histórico donde confluyen varias empresas energética como la refinería de Trafigura y la compañía Oiltanking, que almacena el petróleo que llega desde la cuenca neuquina para enviarlo hacia las refinerías de la provincia. Además, la ciudad cuenta con un polo petroquímico donde operan empresas como Profertil, Dow Argentina, Polisur y Solvay Indupa.
En tanto, la idea de Punta Colorada (Río Negro) como destino de la planta de GNL surge como proyecto de un hub energético. Hoy es un páramo.
Se sabe que Marín le envió días atrás una carta a Kicillof y otra a Weretilneck. El texto contiene nueve puntos que interrogan a ambos gobernadores sobre su predisposición para avalar el proyecto con facilidades y garantías económicas y ambientales.
Ambos gobernadores deben responder el lunes 15 de julio. El gobernador de Río Negro dirá que su Legislatura ya aprobó el RIGI y que está listo para recibir inversiones. Mientras que Kicillof dirá que dará las condiciones necesarias si es que YPF se inclina por Bahía Blanca.
“Confío plenamente en que, si la locación elegida es Bahía Blanca, la provincia encontrará los caminos adecuados para que este proyecto colabore en la transformación de la matriz energética de la provincia”, dijo Susbielles tras la recorrida con Marín en el puerto. Las declaraciones del intendente asoman como una garantía entre dos partes enfrentadas.
Según trascendió, una vez que YPF defina la locación de la planta de GNL, Marín se entrevistará con ambos gobernadores para informar la decisión final.
Mientras tanto, la oposición en la Legislatura bonaerense comenzó a ingresar proyectos que buscan que la provincia adhiera al RIGI. Este viernes el PRO en el Senado avanzó con una de esas iniciativas. “Es imprescindible que la provincia de Buenos Aires adhiera al RIGI para poder calificar como destino de grandes inversiones. De lo contrario las inversiones buscarán ir a otras provincias que ofrezcan mejores condiciones y mayor seguridad jurídica”, dijo Alex Campbell.
En tanto, en Diputados hay tres proyectos. El jefe del bloque PRO, Agustín Forchieri, presentó un proyecto de ley de adhesión al régimen. “Creemos que presentar un proyecto para adherir al RIGI es la mejor manera porque la adhesión es una atribución del Poder Legislativo”, explicó para buscar apoyo de otros bloques opositores.
“Estamos haciendo el trabajo que Kicillof debería impulsar, pero no lo hace. Pareciera que no quiere que las empresas inviertan”, dijo Forchieri.
Por otro lado, el legislador del monobloque LIBRE Guillermo Castello también presentó proyecto de adhesión al RIGI. También hay iniciativas en los municipios bonaerenses de San Isidro, Junín, Mar del Plata y Tres de Febrero.
El gobernador buscará resistir una adhesión al RIGI. En La Plata aseguran que no está claro si efectivamente la provincia debe adherir a través de un proyecto en la Legislatura. Hay quienes afirman que una ley nacional alcanza para que el proyecto acceda a los beneficios sin importar en qué punto del país se instale.
Fuente: La Política Online