Te contamos qué autos se adaptan mejor al GNC, cuáles son los baúles más grandes y qué cuidados tener al comprar un usado a gas.
Es una de las preguntas que más se hacen aquellos que trabajan con su auto, desde remiseros hasta repartidores urbanos o flotas de última milla. Por eso armamos este informe para contarte qué autos se adaptan mejor al GNC y los modelos que podrían ser de tu interés.
Yendo al grano, ¿Qué autos se adaptan mejor al GNC? Simple: aquellos al que se le haga una correcta instalación. Ya sea un auto naftero, diésel o incluso, híbrido, puede tener un equipo de GNC para tener una alternativa de combustible a disposición.
Es decir que no importa la carrocería, si es hatch, sedán o una pick up grande, todos pueden tener un equipo de gas natural comprimido para ahorrar combustible (te dejamos una nota con 10 consejos para esto) y contaminar menos el medio ambiente.
La clave está en ir a un lugar serio, honesto y en el se hagan las cosas bien. Enargas, el ente que regula a los talleres que hacen las instalaciones, entre otras tareas, da un listado completo de locales que cuentan con su habilitación. Ojo: que Enargas les de el visto bueno, no quiere decir que cumplan con todos los procesos debidos en la instalación. Lo mejor, es asesorarse antes de llevar el auto al taller.
La instalación, la clave para un auto a GNC
Conectarle un equipo de GNC al auto significa agregar una fuente de combustible alternativa a la original para que el vehículo se mueva. Y esa fuente es un tubo en forma alargada o de rueda (pensada para ubicarla en el espacio donde se guarda la de auxilio) que se conecta de manera directa al motor para que le sea inyectado el gas que lo hará funcionar.
El sistema está compuesto por cables, reductores, rampas de inyección, ECU y válvulas, que deben ser correctamente ubicados en distintas partes del auto y del vano motor, donde deberán estar alejados de las zonas más calientes para que no se rompan ni quemen. Consejo para chequear a simple vista: las terminaciones de esos cables deben ser prolijas y correctamente aisladas para evitar roturas.
Pero una exitosa colocación también radica en que esté bien sujeto el equipo de gas, con las cunas apropiadas y en zonas seguras que no dañen la estructura del auto ni dejen inestable a la unidad. Además, se deben utilizar arandelas apropiadas, contrachapas y fijaciones del cableado de forma segura.
Con esto es entendible entonces que es mejor que el equipo sea alojado en un lugar espacioso, seguro y que saque la menor cantidad de espacio interior posible. Te dejamos algunas sugerencias…
Tipos de autos que se adaptan mejor al GNC
Todos. Sí, todos, bueno… un eléctrico no. No importa si es naftero o diésel, o incluso híbrido. Todos pueden tener un equipo de GNC. Tampoco importa el tamaño, salvo que sea un microcoche o un citadino como el Smart ForTwo.
Desde un auto chico hasta una pick up enorme como la RAM 1500, pueden llevar GNC. Lo único desafiante en cada caso será ver dónde colocar el o los tubos de gas natural comprimido, algo que no es menor.
Existen equipos que se adaptan al hueco de la rueda de auxilio, otros que se colocan en la caja de la pick up, debajo de la estructura del auto, o lo más común, dentro del baúl. A continuación, te dejamos un listado con los sedanes más populares junto con el detalle de la capacidad de baúl para que puedas tener un panorama más completo
Renault Logan
Baúl: 510 litros
Toyota Etios Sedán
Baúl: 562 litros
Chevrolet Onix +
Baúl: 469 litros.
Volkswagen Voyage
Baúl: 480 litros.
Volkswagen Virtus
Baúl: 521 litros.
Nissan Versa
Baúl: 416 litros.
Chevrolet Cruze
Baúl: 440 litros.
Ford Focus
Baúl: 421 litros.
Volkswagen Vento
Baúl: 510 litros.
Toyota Corolla
Baúl: 470 litros.
Honda Civic
Baúl: 525 litros.
Nissan Sentra
Baúl: 466 litros.
Otros modelos que comúnmente equipan cilindros de GNC son los Peugeot Partner, Renault Kangoo, Citroën Berlingo o Fiat Fiorino. Pero también, aunque muchos renieguen de ello, las pick ups tienen espacio y distancia del suelo ideales para poder colocar el equipo en distintas partes. A la hora de ahorrar, ya sea para trabajar o bajar los costos propios, el GNC es un aliado, no te dejes llevar por la típica frase «¡cómo le vas a poner GNC a una pick up!».
Quiero un usado y tiene GNC, ¿Qué hay que revisar?
Si el usado que te interesa tiene un equipo de GNC, no lo descartes. Por un lado, es mejor comprarlo con el equipo instalado (siempre y cuando te interese usar GNC) a que lo saque. Si el trabajo estuvo bien hecho, aprovechalo y sacale el jugo.
Para saber que el trabajo fue un éxito es importantísimo que revises tres aspectos fundamentales: documentación, seguridad y funcionalidad. El primero incluye el número de serie del regulador, número de serie del tanque y número de serie del cilindro, todo registrado en la cédula celeste de Energas (si carece de ella, quizás sea mejor sacar el circuito). Podés consultar también en la web de Enargas con el número de dominio del usado a comprar.
Por último en cuanto a la seguridad, si está OK el registro, hacé revisar cómo está instalado con un especialista de confianza para ratificar que no corres peligro. No te quedes con la palabra del vendedor. Y por último, hacé una prueba de la funcionalidad, es decir, si anda correctamente.
Fuente: Autotest