La firma del rombo presentó en nuestro país a su nuevo crossover 100% eléctrico, que se destaca por su diseño y nivel de tecnología, tanto en conectividad y confort como en seguridad. Está impulsado por un motor de 218 CV, alimentado por un paquete de baterías de 60 kWh de capacidad, con una autonomía de 450 kilómetros. Además, contará con beneficios exclusivos para sus clientes. Estará disponible en la red oficial a partir de mayo.
Con un impresionante despliegue y evento realizado en el Teatro Colón, que incluyó a algunos de los modelos más icónicos de la marca, Renault presentó en Argentina el nuevo Mégane E-Tech Electric, que había sido anticipado durante la campaña de verano en Cariló.
Se trata de su producto más tecnológico y avanzado con el que la compañía reafirma su estrategia de electrificación y que se suma a la incipiente gama de eléctricos en nuestro país: el primer paso fue la recordada Kangoo Z.E., luego y más recientemente fue el turno del Kwid E-Tech, ahora el Mégane y próximamente se incorporará la nueva Kangoo E-Tech Electric.
Al respecto, Pablo Sibilla, Director General y Presidente de Renault Argentina, afirmó: “Una nueva etapa de la movilidad comienza en Argentina a partir de la llegada de este modelo y qué mejor que presentarlo en un lugar emblemático para todos los argentinos como el Teatro Colón. El Megane E-Tech 100% eléctrico combina lo mejor del diseño, el confort, la seguridad y la tecnología de avanzada del nuevo portafolio de Renault en el mundo. Algunas cosas son difíciles de describir con palabras, y Megane E-Tech es una de ellas. Por eso, quiero invitarlos a conocerlo y vivir junto a nosotros esta revolución eléctrica que ya comenzó en nuestro país de la mano de Renault”.
Estas son sus características principales:
Lo nuevo:
Es el nuevo crossover 100% eléctrico de la marca del rombo y que se posiciona como su nueva nave insignia en Argentina, tanto por equipamiento, tecnología y precio, como por sus características innovadoras.
Desarrollado sobre la plataforma modular CMF-EV refleja la evolución del segmento C, pasando de ser un hatchback mediano a un crossover. Si el concept e-vision ya resultaba atractivo, la versión de producción lo es por igual ya que mantiene gran parte de su diseño, sólo cambiaron algunas piezas para facilitar su producción en serie.
A pesar de que la silueta tiene algunas similitudes con la cuarta generación del hatchback, también cuenta con rasgos propios de un crossover, como su mayor altura y despeje en el que colaboran las enormes llantas de aleación de 20 pulgadas. En el sector frontal se destacan los faros de Led finos y alargados junto con una firma luminosa en forma de C, más estilizada que llega hasta el paragolpes, con una suerte de toma de aire con una máscara de color dorado que corta con el tono negro de la grilla. De perfil, las manijas de las puertas traseras están “ocultas” sobre el pilar C, mientras que el remate posterior se caracteriza por los finos faros de Led y la pequeña luneta que continúa la línea de cintura y la del techo. Como en todo crossover, posee protecciones en plástico negro en los pasarruedas y paragolpes.
En su interior, el tablero cuenta con dos enormes pantallas (una de 12,3 y otra de 12” en posición vertical) unidas entre sí que abarcan desde el instrumental hasta la consola central desde donde se comandan todas las funciones del auto. Los mandos físicos quedan reducidos a lo mínimo indispensable y las salidas de aire están ocultas detrás de las pantallas, así como también en el sector del pasajero. El volante es de nuevo diseño, posee varios botones para operar distintas funciones, pero tampoco falta el clásico comando satelital típico de Renault. La selectora de marchas se ubica sobre la columna de dirección en lugar de su ubicación habitual. Meses atrás, cuando fue develado el prototipo, desde la firma del rombo resaltaron además, los numerosos huecos portaobjetos repartidos en todo el habitáculo, así como un avanzado sistema de conducción autónoma que ajustará la velocidad en función de los límites indicados por las señales de tránsito. Por supuesto dispone de control de velocidad crucero adaptativo, alerta de cambio de carril involuntario, frenado autónomo de emergencia, estacionamiento semiautónomo y cámaras con visión de 360º.
Dimensiones:
4.200 mm de largo, 1.519 mm de alto, 1.768 mm de ancho (2.055 mm con espejos), con una distancia entre ejes de 2.685 mm. La capacidad del baúl es de 440 litros.
Equipamiento destacado:
Climatizador automático bizona con salidas de aire para plazas traseras, equipo de audio Arkamys con 6 parlantes, sistema multimedia OpenR Link compatible con Android Auto y Apple CarPlay, selector de modos de conducción, iluminación ambiental personalizable, butacas y volante calefaccionados, levantavidrios eléctricos con one touch, volante multifunción, reconocimiento de voz, faros de Led adaptativos y llantas de aleación diamantadas de 18”.
Equipamiento de seguridad:
7 airbags, control de tracción, control de estabilidad, frenado autónomo de emergencia, alerta de punto ciego con corrección de la dirección, alerta de tráfico cruzado trasero, asistente al arranque en pendientes, lues altas y bajas automáticas, control de velocidad crucero adaptativo, reconocimiento de señales de tránsito con alerta de exceso de velocidad, advertencia de colisión frontal, detección de peatones, ciclistas e intersecciones, asistente de mantenimiento de carril, alerta de cambio de carril involuntario, alerta de salida segura del acompañante y sensores de estacionamiento, entre otros ítems.
Mecánica:
En nuestro país está disponible en una única opción (tope de gama en Europa), impulsada por un motor de 218 CV, alimentado por una batería de 60 kWh de capacidad, que le proporciona una autonomía de 450 kilómetros. Según datos de fábrica, puede acelerar de 0 a 100 km/h en 7,4 segundos y alcanzar una velocidad máxima limitada electrónicamente de 160 km/h. También cuenta con frenado regenerativo –con 4 niveles de recuperación- y tecnología V2G, pudiendo intercambiar energía con la red eléctrica hogareña.
La batería puede recargarse con un cargador AC hogareño de hasta 22 kW o un cargador rápido DC de hasta 130 kW, que permite recuperar una autonomía de 300 kilómetros en sólo 30 minutos.
Beneficios exclusivos:
- Primeros dos services sin cargo, a los 10.000 y 20.000 kilómetros
- Entrega de tuercas y kit de seguridad sin cargo.
- Vehículo sustituto inmediato (todo cliente que experimente la inmovilización de su unidad por un tiempo prolongado tendrá disponible una unidad similar como vehículo de cortesía sin cargo).
- Prioridad de atención y turno en la Red de Concesionarios.
- Precios exclusivos y financiación a través de Mobilize en la compra del cargador Chargebox net.
- Membresía Mobilize Charge Pass bonificada por 6 meses para utilizar en toda la red Chargebox net del país.
- Bolso de cuero que contiene el kit de seguridad + tuercas
- Merchandising exclusivo E-Tech
- Beneficios exclusivos en el programa MyRenault
Posventa y cargadores:
Al igual que con el Kwid, Renault, a través de su división Mobilize, continuará ofreciendo cargadores particulares monofásicos (de 7,4 kW de potencia), cargadores empresariales trifásicos (de 22 kW de potencia) y cargadores de emergencia (con toma doméstica a 220 V) que tendrán la opción de ser financiados por Mobilize Financial Services.
Por otro lado, además de contar con una red de servicio capacitada en vehículos eléctricos, la marca contará con un Centro de Reparación de Baterías de Tracción exclusivo para reparar baterías en períodos de garantía.
Precio y garantía:
- Renault Mégane E-Tech Electric: $71.000.000
- Garantía de 3 años o 100.000 kilómetros. La batería posee una garantía de 8 años o 120.000 kilómetros.
Fuente: 16 Válvulas