Incorporar herramientas que permiten seleccionar información y contar con análisis integral del suelo para tomar decisiones es un desafío para la producción
l momento de tomar decisiones, en las empresas agropecuarias cada vez más tiene relevancia la importancia de la gestión del conocimiento. La evolución de la agricultura en los últimos años, el aumento de la información y las nuevas tecnologías generan una oportunidad para hacer más eficiente la producción agropecuaria, pero sistematizar y ordenar todos los datos es un desafío.
Así lo demuestran las experiencias de tres compañías del agro: Haras Anicetto SA, Cosufi Agropecuaria y Agropecuaria Los Tamarindos, que lograron incorporar herramientas que permiten seleccionar información y contar con análisis integral del suelo para tomar decisiones y lograr una mayor productividad y eficiencia de manera sostenible y rentable
José Luis Goyenechea, de Agropecuaria Los Tamarindos, destacó la importancia de acompañar el trabajo en el campo con soluciones integrales. Señaló que para llegar a esa decisión hay que conocer el suelo de cada uno.
Sobre los resultados obtenidos, tras realizar un manejo de los campos de la mano de herramientas integrales, Alessandro Metallino, gerente de producción de Haras Anicetto SA, aseguró: “Los resultados están a la vista en el achique de brecha de los pisos y en los rendimientos”.
En tanto, Andrés Barrionuevo, responsable de agricultura de La Vizcachera, de Cosufi Agropecuaria, con números contundentes, señaló: “Dependiendo del año, se puede lograr entre un 3 y 5% del retorno. Se puede dar en los ambientes altos ajustando por cantidad de semillas o fertilizantes, obteniendo más producción, y en los ambientes de baja generalmente por reducción de costos”
Según explicaron, las tres empresas agropecuarias tienen un factor en común: desde hace varios años trabajan con información y variables que le brindan las diferentes tecnología. En este caso, con la ayuda de profesionales que colaboran en la selección de toda esa información para que “cada uno pueda contar con un análisis integral del suelo al momento de tomar decisiones y, así, lograr una mayor productividad y eficiencia en la campaña de manera sostenible y rentable”.
Sebastián Storti, responsable de Experta en el área de servicios tecnológicos de AGD, destacó que la clave del éxito es “estar muy cerca del productor en el día a día, brindando asesoramiento sobre la información que generan las imágenes satelitales, los análisis de suelo, el historial de cada ambiente y así poder acompañarlos al momento de la toma de decisiones”.
Detalló que el mapeo de electroconductividad con sensores y el muestreo de suelos intensivos son fundamentales para lograr un manejo sostenible y rentable. Junto a los servicios de pulverización selectiva y fertilización variable el campo evoluciona. “Cada vez más productores toman servicios de precisión. Cada vez esto es más masivo, donde los productores acceden porque conocieron la respuesta al uso de estas tecnologías de dosis variable”, señaló.
En la actualidad, los productores y empresas agropecuarias pueden acceder desde sus dispositivos móviles a toda la información de sus suelos que se concentra en una plataforma digital. En el congreso de Aapresid, dijeron, “se podrá ver nuevas herramientas que ayudan a simplificar las estrategias de manejo para tener mejores resultados de manera estable”.
Storti subrayó que se ofrecen beneficios concretos. “Lo podemos separar en la semilla de maíz variable, según la zona, está entre un 5 y 12% de respuesta. En fertilizantes nitrogenados, la respuestas puede ser mucho mayor, dependiendo del lote, pero tenemos lotes de hasta 100 dólares por hectáreas de respuesta a la fertilización nitrogenada. Lo que nos viene sorprendiendo es el fósforo, un nutriente muy deficiente en nuestro suelo. En la zona agrícola aumentó de entre 5 y 14 quintales en maíz solo por voleo de fósforo y 5 o 7 quintales de soja”, precisó y sumó que “se va acumulando esa respuesta año a año en la franja testigo”.
Metallino resaltó que “tener un diagnóstico inicial de un suelo en el que puedas ver cuáles son las limitantes de tu producción, te permite trabajar en el mediano plazo para seguir subiendo esos rendimientos”. En tanto, Barrionuevo explicó que antes de sumar este servicio “la empresa siempre aplicó fertilizante, aplicaciones fosforadas en forma masiva, con dosis promedio de acuerdo a lo que requieren los ambientes más grandes” pero con los análisis más minuciosos encontraron ambientes en los que la prescripción es dosis cero.
“Fuimos manteniendo los mismos promedios de aplicación pero mejor distribuidos. Una optimización en el uso de los recursos, poner donde hace falta”, indicó. Por último, Goyenechea concluyó: “El suelo es la fábrica; si la alimentamos con buenos insumos y somos eficientes y lo cuidamos, vamos a ser sustentables y rentables”.
Fuente: La nacion