La petrolera estatal reactivó una unidad fundamental, que representa una esperanza de alivio para la escasez en la región occidental del país.
La empresa estatal petrolera de Venezuela, PDVSA, reinició durante el fin de semana una unidad clave en la producción de combustible, lo que podría aliviar la escasez de nafta en la región occidental del país.
La refinería Amuay, con una capacidad de procesamiento de 645.000 barriles por día (bpd), había mantenido fuera de servicio su unidad de craqueo catalítico fluidizado (FCC, por su sigla en inglés) desde marzo debido a trabajos de reparación.
“La unidad catalítica de Amuay está ahora en funcionamiento, procesando alrededor de 70.000 bpd”, afirmó una de las fuentes. La FCC tiene una capacidad de procesamiento de 108.000 bpd.
Sin embargo, la refinería Cardón, ubicada cerca de Amuay y con una capacidad de 310.000 bpd, aún no ha logrado reiniciar su unidad FCC, que ha estado fuera de servicio desde principios de junio debido a problemas en los equipos.
Los trabajadores están actualmente trabajando para poner en funcionamiento un reformador de nafta en Cardón en los próximos días, con el objetivo de aumentar la producción de combustibles para motores, según indicaron las fuentes.
Las fallas y el mantenimiento no planificado a menudo interrumpen las operaciones en la envejecida red de refinación de PDVSA, que tiene una capacidad total de 1,3 millones de bpd, lo que provoca escasez de combustible, especialmente de gasolina y diésel.
Amuay y Cardón forman parte del complejo de refinación más grande de PDVSA, conocido como Centro Paraguaná, con una capacidad total de 955.000 bpd.
Según las fuentes, el complejo refinador estaba procesando el lunes alrededor de 237.000 bpd, aproximadamente una cuarta parte de su capacidad instalada.
Fuente: El Litoral