Tras las pérdidas por la adversidad climática, en el evento de El Cronista, el Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación expresó perspectivas optimistas para la próxima campaña
El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Juan José Bahillo, participó en la apertura del evento Economías Regionales Centro, organizado por El Cronista y la revista Apertura el pasado viernes. Allí, destacó el trabajo de los productores argentinos y reveló que se trata de un sector “resiliente y perseverante”, que intenta levantarse, pese a la coyuntura económica y la sequía.
De hecho, reconoció que la alta inflación, la baja rentabilidad de las exportaciones y los elevados costos de producción e insumos son los principales desafíos para los productores del centro de la Argentina. Estos se suman a la histórica sequía, que significó una pérdida de u$s 20.000 millones para el sector.
Con el objetivo de mejorar la rentabilidad y devolver la competitividad a las economías regionales que, ya fuera por brecha cambiaria o por incrementos en los costos de producción, la habían perdido, el organismo nacional lanzó el programa ‘dólar soja’, que reconoció un tipo de cambio diferencial para incentivar la liquidación.
“Teniendo en cuenta que hay economías regionales que exportan el 95% de su producción y que algunas, incluso, alcanzan el 98%, decidimos brindar una mejora en el tipo de cambio para aquellos productores que comercializaran sus productos en el mercado externo”, sostuvo. Además, reveló que “ese saldo exportable tiene hasta el 31 de agosto un contra valor $ 300”.
“Las economías regionales acomodaron su logística de comercialización y cobranza para poder aprovechar al máximo posibilidad. Es más, ya hay alrededor de 400 empresas inscriptas en el programa”, enfatizó. A su vez, añadió que, al contrario de lo que se suele pensar, la sequía afectó tanto a la agricultura como a la ganadería. Por ende, reconoció que “la estructura de costos versus precio de mercado no es la mejor para estos productores.”
De esta manera, expuso que, a causa de la sequía, las pérdidas fueron considerables. En el caso del trigo, las pérdidas fueron del 40%, si se compara la última campaña, en la que se produjeron 12 millones de toneladas, con la anterior, en la que se habían exportado 21 millones de toneladas. En el caso de la soja, pasó de 44 millones de toneladas a entre 25 millones y 27 millones, mientras que, en el maíz, se retrocedió de 59 millones 35 millones de toneladas.
Sin embargo, también aclaró que “la producción va hacia un camino de recuperación y que, dadas las predicciones climáticas con las que contamos, la campaña 2023-2024 va a generar buen saldo que hasta podría recuperar los volúmenes perdidos a causa de la sequía”.
Fuente: Cronista