z.system

A través de un artículo en su revista oficial, la Dirección General de Tráfico (DGT) desmintió cuatro mitos comunes sobre los automóviles eléctricos. Cuáles son y por qué no son ciertos.

Si bien estamos acostumbrados a que la Dirección General de Tráfico (DGT) reporte sobre normativas o brinde consejos para evitar malas prácticas al volante, el organismo también brinda otro tipo de información. Esto lo hace a través de sus diferentes canales de comunicación, como sus redes sociales o campañas de bien público.

Otra de las formas que tiene el organismo de llegar a las personas es a través de su revista mensual: “Revista Tráfico y Seguridad Vial”. La misma es gratuita y puede accederse a través de su portal web.

Durante el número de marzo, esta publicación contó con un artículo en el cual mencionan los diferentes mitos alrededor de los coches eléctricos. De esta manera, la DGT quiere generar conciencia sobre los beneficios de este tipo de vehículos, de manera que más personas puedan apreciar sus ventajas.

 

Cuáles son los mitos sobre los coches eléctricos mencionados por la DGT

Precio

Según indica el artículo, la principal dificultad de acceso a un coche eléctrico radica en el precio. Sin embargo, según indicó Luis Miguel Vitoria, cofundador de la compañía de capacitación y consultoría EVE (Expertos en Vehículos Eléctricos), esto no es tanto “porque sean excesivamente caros, sino porque la mayoría de los fabricantes han elegido vehículos de segmentos superiores“. A esto se suma la lentitud de las subvenciones gubernamentales: “El Moves III ofrece hasta 7.000 euros, pero el proceso es complicado y se considera una ayuda patrimonial, lo que afecta al IRPF”.

Impacto en el medio ambiente

Tradicionalmente, se ha enfrentado el empleo de energía limpia en vehículos eléctricos con la huella ambiental generada durante su producción. Un reciente análisis de National Geographic indicaba que todos los coches consumen mucha energía en su fabricación, ya que utilizan materiales como acero, caucho, vidrio, plásticos y pinturas, aunque entre el 80 y el 90% de su impacto ecológico proviene del consumo de combustible y sus emisiones.

 

Desde Applus Idiada, empresa de ingeniería que brinda servicios de diseño, pruebas, ingeniería y homologación a la industria automotriz, los coches eléctricos permiten eliminar dichas emisiones, “ya sean de gases de efecto invernadero o de contaminantes” ya que solo quedarían “las partículas generadas en los frenos y en los neumáticos, comunes a todos los vehículos”.

 

Luis Miguel Vitoria opina que el mayor impacto ecológico reside “en la producción de la batería, que requiere mucha energía para fabricarse”, por lo que es crucial utilizar energías limpias en su elaboración. La ventaja de la batería es que “mantiene un 75% de su capacidad útil después de ocho años y 165.000 kilómetros. Además, se puede emplear para almacenar la energía fotovoltaica generada por paneles solares domésticos”.

La DGT derribó algunos mitos sobre los coches eléctricos (Fuente: Archivo)

 

Autonomía

Otro de los mitos más comunes tiene que ver con la autonomía de este tipo de coches. Este aspecto presenta dos variables: la cantidad de energía que puede almacenar la batería, lo que se traduce en kilómetros recorridos por carga, y la supuesta pérdida progresiva de capacidad de almacenamiento.

 

Desde Applus Idiada afirman que “la futura normativa Euro 7 ha incorporado un requisito de durabilidad” que exige a vehículos eléctricos e híbridos garantizar hasta un 80% de la capacidad energética de la batería durante cinco años y un 70% a los siete años. En cuanto a la autonomía por carga, Vitoria señala que los modelos nuevos ofrecen alrededor de 400 km, lo que, “considerando que en Europa la distancia promedio recorrida diariamente es de 70 km, con una sola carga alcanza para 5-6 días”.

Falta de infraestructura

El último mito que menciona la publicación de la DGT es la falta de puntos de recarga. Según el Barómetro de Electromovilidad de ANFAC, en España existen aproximadamente 17.000 puntos de recarga de acceso público, muy lejos de los 45.000 que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima preveía para 2022.

Sin embargo, el año pasado se calcularon que había 78.000 coches eléctricos en el país, por lo que la carencia de estaciones de carga no se percibe tanto. Expertos reconocen que “para el uso diario de coches eléctricos, aún es recomendable contar con la posibilidad de cargar en casa o en el lugar de trabajo”, aunque destacan que los sistemas de carga se están volviendo más rápidos y eficientes.

Otro aspecto relacionado es el riesgo planteado por algunos de que un uso masivo de vehículos eléctricos pudiera poner en peligro la capacidad de producción de energía. Red Eléctrica (REE) lo desmiente al afirmar que “por cada millón de vehículos, la demanda del sistema aumentaría en torno al 1%”.

 

Fuente: Cronista