Entraría en vigencia el 1° de octubre próximo, aunque el Ejecutivo viene postergando la actualización desde 2021
El Gobierno volvió a postergar la actualización del impuesto sobre los combustibles líquidos, que debía empezar a regir mañana. Se trata de la tercera vez en el año que estira la normativa, con el objetivo de “asegurar una necesaria estabilización y una adecuada evolución de los precios”. La nueva fecha de vencimiento es el 1° de octubre próximo.
“Tratándose de impuestos al consumo y dado que la demanda de los combustibles líquidos es altamente inelástica, las variaciones en los impuestos se trasladan en forma prácticamente directa a los precios finales de los combustibles”, justificó el decreto 561/202, que fue publicado esta madrugada en el Boletín Oficial.
Sucede que en 2018 se dispuso que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) actualice el impuesto a los combustibles en los meses de enero, abril, julio y octubre de cada año. En cada ocasión, se deberá considerar la variación de la inflación que informa el Indec, correspondiente a cada período trimestral precedente. El objetivo era amortiguar las fluctuaciones del dólar o de la cotización del crudo, factores que se tenían como referencia previamente.
Sin embargo, desde 2021 el Ejecutivo viene difiriendo las actualizaciones para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil. Con el decreto de hoy, se trata de la sexta postergación de la aplicación del impuesto. Ahora quedan pendientes las actualizaciones correspondientes a los cuatro trimestres de 2021 y las del primer y segundo trimestre de este año.
“Con el objetivo de adecuar progresivamente las diferentes variables, se torna pertinente aplicar las actualizaciones correspondientes al primer y segundo trimestres del año 2021 a partir del 1º de octubre de 2022, inclusive”, agregó la normativa.
La normativa llega en momentos donde la inflación amaga con llegar a las tres cifras, situación donde los combustibles no se quedan atrás. Hace diez días YPF anunció una suba del 8,5% para las naftas y del 6% para el gasoil, movimiento que replicaron Shell y Axion.
Fuente: Nacion