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Los especialistas calculan que hacia 2027 se reducirán los tiempos de carga de las baterías.

Un estudio publicado por The Washington Post reveló que la próxima generación de vehículos eléctricos podría recargarse al 90 por ciento en tan solo diez minutos.

Si las baterías de los eléctricos actuales se cargan muy rápido, pueden dañarse, lo que reduce la vida útil y requiere un reemplazo costoso. Pero un grupo de investigadores utilizó técnicas de aprendizaje automático para estudiar cómo envejecen las baterías cuando se cargan a alta velocidad y utilizó esa información para ayudar a aumentar los tiempos de carga de manera segura.

Al estudiar los resultados de hasta 30.000 puntos de datos, crearon un protocolo de carga que permitiría una carga ultrarrápida sin dañar la batería.

“La carga rápida es la clave para aumentar la confianza del consumidor y la adopción general de vehículos eléctricos”, dijo Eric Dufek, quien presentó el resultado del estudio en una reunión de la American Chemical Society. “Permitiría que la carga del vehículo fuera muy similar a repostar nafta en una estación de servicio”

Producir baterías que se puedan cargar más rápido no solo ayudará a reducir los tiempos de viaje. También hará que los vehículos eléctricos sean más baratos y eficientes. Más baratos, porque los fabricantes de automóviles podrían ofrecer vehículos con baterías más pequeñas, ya que la reducción de la autonomía se compensaría con la capacidad de cargarse más rápidamente.

Todo esto ayudaría a los conductores que no necesitan cubrir largas distancias de forma rutinaria a cambiar a la energía eléctrica. Y dado que la mayor parte del problema de peso de un auto eléctrico se debe a la batería, reducir el tamaño del paquete también reduce el peso en vacío, lo que significa que el motor necesita consumir menos energía para moverlo.

Tres mitos falsos sobre los autos eléctricos

  • Son diferentes: un auto eléctrico puede ser exactamente igual a uno con motor a combustión, pese a que tiene una construcción distinta. Esto se debe a que los autos eléctricos tienen baterías, y las mismas se distribuyen debajo del piso del habitáculo para que no ocupen lugar en otras zonas.
  • No están hechos para viajar: depende de la capacidad de nuestro auto; es decir, de su autonomía. Pero depende sobre todo de la red de cargadores que exista en el camino que queremos tomar. Si bien nosotros podemos cargarlo en casa, si agotamos la batería durante el viaje dependeremos de los cargadores que haya en la ruta.
  • No andan fuerte: mal que les pese a los petrolheads, el rendimiento de los motores eléctricos es impresionante. Ya hay vehículos con alrededor de 1000 caballos de potencia y capacidades de aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos, cifras que cualquier súper deportivo a combustión envidiaría.

Fuente: TN