La tripulación de un helicóptero mexicano que sobrevoló este miércoles el incendio en una base de almacenamiento de combustible en Matanzas, en el oeste de Cuba, informó que el fuego comienza a estar controlado.
Uno de los cuatro tanques incendiados “ya está prácticamente apagado”, dijo a la televisión un piloto cubano que acompañó a sus colegas de la armada mexicana. “Hoy vamos a darle el remate”, añadió.
El piloto estimó que “el trabajo fue efectivo” ya que se logró mantener fresca la tubería que conecta el depósito con otros cuatro tanques de 52 millones de litros cada uno, ubicados a solo 150 metros.
En un segundo tanque, según imágenes entregadas por la tripulación a la televisión cubana, se observa menos humo y las llamas son más débiles que en días anteriores. En los dos depósitos restantes no se pudo comprobar la situación ya el humo dificulta la visión, aunque las llamas son menos intensas.
El incendio se declaró el viernes después de que un rayo impactara uno de los ocho tanques, con capacidad cada uno de 50 millones de litros de combustible, ubicados en la base de almacenamiento de combustible ubicada a 100 kilómetros al este de La Habana.
Desde la ciudad de Matanzas, a 4 kilómetros del incendio, se ve menos humo que en días anteriores, según constataron periodistas de la AFP.
También observaron el buque Bourbon Artabaze, de la armada mexicana, lanzando un potente chorro de agua a unos 150 metros del fuego mientras que cinco helicópteros equipados con depósitos de 2.500 litros dejan caer agua de mar.
El incendio ha dejado hasta ahora un bombero muerto y 128 personas han recibido atención médica por quemadauras y lesiones, 20 de las cuales siguen hospitalizadas.
Otros 14 bomberos están desaparecidos.
El presidente Miguel Díaz-Canel explicó el martes a la prensa que en la medida de que se sofoquen las llamas y baje la temperatura “podremos entrar a recuperar a las víctimas”, en referencia a los desaparecidos.
“Va a ser un momento muy duro” para el cual “tenemos que estar preparados y brindar apoyo a esas familias”, agregó.
La central termoeléctrica Antonio Guiteras, una de las principales del país, retomó la actividad el miércoles después de permanecer dos días parada por la contaminación del agua provocada por el vertido de combustible, lo que agravó la crisis de generación y distribución de electricidad en Cuba.
Fuente: La nacion