Además, el Gobierno porteño decidió modernizar las existentes. El objetivo es disminuir las dos conductas que representan la mayoría de los siniestros viales.
Sobre el tipo de usuario fallecido, indicó que un 48% fueron motociclistas, seguidos por los peatones con un 34%, ocupantes de automóvil en un 11% y ciclistas en un 5%.
Ante este panorama, los funcionarios de la Ciudad determinaron sumar 73 nuevos puntos de control, lo que elevará la cantidad de cámaras para tal fin a 208.
“Trabajamos con la seguridad vial como prioridad porque estamos convencidos que ninguna víctima en un siniestro de tránsito es aceptable. La fiscalización a través de cámaras es una herramienta fundamental para corregir y mejorar conductas y esto puede salvar vidas, por eso modernizamos el sistema con equipos de última generación y sumamos nuevas ubicaciones donde detectamos mayor concentración de incidentes”, afirmó Manuela López Menéndez, secretaria de Transporte y Obras Públicas.
Mientras que Felipe Miguel, jefe de gabinete del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, sostuvo: “En la Ciudad los siniestros viales están en los niveles más bajos de los últimos doce años. Esto no ocurre por casualidad o por arte de magia. Esto ocurre porque trabajamos con planificación, analizamos los datos, identificamos problemas y todo el equipo de la Ciudad actúa para lograr resultados. Hoy estamos sumando más cámaras y apuntamos a tener, en 2030, la mitad de siniestros viales”.
Fuente: Ambito