Pese a que Rafael Segrera, CEO de Schneider Electric para América latina, todavía ve lejano el boom de los autos eléctricos en el país y la región, aclara que, cuando se produzca, será imparable. La empresa francesa ya puso primera e inaugurará estaciones de carga en shoppings de IRSA
Mientras la industria automotriz local estudia cómo se adaptará a ese cambio, y el propio Gobierno impulsa una ley de electromovilidad, el CEO en la región de uno de los principales fabricantes de estaciones de carga y equipos para uso energético advierte que, todavía, “faltarán años” para que la los autos eléctricos lleguen a América del Sur y, en consecuencia, al país.
No obstante, ya puso primera para anticiparse a ese momento y, en los próximos días, inaugurará los puestos de carga que instaló, con equipos de su propia producción, en algunos de los shoppings de IRSA.
“No estamos rápidos en la región. Es un proceso que tardará mucho en arribar a la Argentina”, aseguró Rafael Segrera, presidente de Schneider Electric para América latina. Pero el ejecutivo, que comanda las operaciones de la empresa francesa en esta parte del mundo, aclaró: “No hay dudas de que, cuando llegue, el proceso será acelerado”.
Cuando eso ocurra, agregó Segrera, la empresa también estará atenta a uno de los negocios clave que abrirá la electromovilidad y en el que la Argentina tiene alto potencial: el litio.
“La industria de los vehiculos eléctricos está creciendo mucho en el mundo. El litio acompaña ese crecimiento y vemos una actividad muy interesante. De hecho, lo vemos con optimismo”, subrayó.
Schneider tiene 185 años a nivel global. En las últimas dos décadas, reformó su propuesta de valor muy alineada con la sustentabilidad y con los Objetivos de Desarrollo (ODS) de la ONU. Su principal meta es optimizar el uso de los recursos y la energía para acelerar el progreso y la sustentabilidad.
Según el estado financiero del tercer trimestre del año, los ingresos del grupo crecieron un 9%, hacia un record de 7200 millones de euros a nivel global.
En términos acumulados, “se registra un crecimiento orgánico del grupo del 7% en los primeros nueve meses del año frente a igual periodo de 2019“, destacó el informe.
“En 2020, tuvimos un año con muchos retos. Salimos con una pandemia muy clara. Pero tuvimos la oportunidad de asegurar la continuidad. Continuamos nuestras operaciones porque son esenciales. Tuvimos que mantener a las fabricas operando; tuvimos que dar herramientas para que esas energía siga funcionando”, explicó Segrera.
De cara a lo que se viene, el ejecutivo aseguró: “En los últimos años, el crecimiento promedio de la compañía es en torno al 2%. Pero vemos un ciclo positivo para los próximos cinco años, con un desarrollo de entre el 5% y el 8%”.
INVERSIONES EN LA ARGENTINA
“En la planta de Florida, estamos trabajando en un nuevo lanzamiento que tiene que ver con celdas de media tensión para la energía eléctrica“, contó con respecto a los planes locales el CEO de la región.
Se trata de SM AirSeT, una celda de media tensión sostenible y digital que cambia el gas SF6 por aire puro. Esta tecnología jugará un papel importante en la descarbonización de la electricidad, además de contribuir a la economía circular.
La flamante celda, cuyos componentes son 100% reutilizables, tiene la posibilidad de incorporar sensores de temperatura y ambiente, que permiten recopilar los datos históricos de funcionamiento para poder intervenir de manera inmediata ante un defecto.
En tanto, durante los próximos días, la empresa tiene previsto instalar cargadores eléctricos que serán de uso gratuito en el Alto Palermo a través de un sistema solar para obtener la energía. También los habrá en Paseo Alcorta, Patio Bullrich, el DOT Baires y en Mendoza Plaza Shopping.
Schneider ya tiene 39 años en el país, con más de 430 empleados propios. “Buscamos ofrecer soluciones tecnológicas que transformen y potencien los procesos productivos de clientes en múltiples industrias”, explicó el CEO regional.
La empresa tiene una planta de producción el Florida, Vicente López, y un centro de distribución propio, además de cuatro centros de formación técnica.
Fuente: Cronista