Como el clima, con extremos de temperatura y algunas lluvias, el sector cuenta los días para las elecciones. Sigue el déficit de insumos importados. Se mantiene la suba para los terneros.
La sumatoria de datos para llegar a este resultado, que incluye más de 40% de capacidad ociosa instalada, son muchos, aunque los más salientes en esta campaña, además de las retenciones a la oleaginosa, son la grave e inédita bajante del Paraná que obliga a completar carga en los puertos del sur (con el consecuente incremento de costos), y las medidas de fuerza sindicales que fueron jalonando todo el período. De hecho, desde el miércoles hay una medida imprevista de cese de actividades de SOEA que mantiene sobre las terminales de up river y que se extiende hasta hoy inclusive.
Según sostienen los empresarios, “La única razón es que el sindicato rechaza que se aplique retenciones del impuesto a las ganancias fijadas por Ley. Dada la existencia de sueldos altos en la industria, todos los trabajadores están sujetos a retenciones por ley. Las empresas se ajustan plenamente a su cumplimiento y no existen errores ni prácticas de retenciones fuera de la ley más allá de algunos argumentos insólitos del sindicato”. Según se supo, debido a esto “la exportación queda paralizada con las consecuencias graves para el país”.
…que, la noticia coincidió con el informe que da cuenta que “el ingreso de divisas acumulado de la agroexportación en los primeros diez meses del año alcanzó los 28.086.928.631 dólares. lo que refleja un incremento del 66,6 % con respecto al mismo período del año pasado y récord absoluto para el mismo período desde comienzos de este siglo. El factor predominante de esta situación fue el sostenido crecimiento de los precios internacionales, lo que compensó la menor cantidad medida en toneladas. Debido a estos guarismos, y a pesar de los inconvenientes climáticos, y gremiales, además de la postergación de algunas leyes claves para elector que se centren en “la estabilidad y la certeza”, como señaló el titular de Ciara, Gustavo Idígoras, las exportaciones de este rubro podrían terminar el año rondando los u$s35-38.000 millones, cifra que sería sensiblemente mayor si se hubiera mantenido la tendencia de crecimiento en la producción de soja que tuvo hasta los rimeros años del 2000. Igual, el sostenimiento de los precios internacionales, tanto en granos como en carne, y últimamente la recuperación relativa de la leche, van a permitir el crecimiento de las exportaciones, por precio y no por volumen, como ya se menciono. En el caso de la leche, además, el comercio exterior permitiría compensar la caída del consumo local, la más alta de los últimos años. Según los datos que publicó el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), entre enero y agosto el mercado interno absorbió casi 7% menos de productos lácteos.
Fuente: Ambito