El nivel de actividad en el shale de Norteamérica sigue concentrado en los trabajos de fractura. El ritmo de perforación de nuevos pozos sigue deprimido.
Las petroleras en Estados Unidos continúan vaciando su stock de pozos perforados, pero no completados y en julio de este año alcanzaron una marca que no se veía desde 2017. La mayor disminución se detectó en la Cuenca Permian.
Según el último informe de Producción y Productividad de la Administración de Información Energética (EIA) de Estados Unidos, durante el séptimo mes del año, el número de pozos perforados, pero no completados (DUCs, por sus siglas en inglés) cayó a un total de 5.957, se trata de la marca más baja desde noviembre de 2017.
La disminución de los DUCs se detectó en la mayoría de las principales cuencas petrolíferas del país norteamericano, pero principalmente en la región Pérmica. Este presente refleja que las petroleras se enfocaron más en completar de pozos y, al mismo tiempo, dedicaron menos recursos a la actividad de perforación de pozos nuevos.
Este nivel de terminación de pozos está aumentando la producción de petróleo en la Cuenca Permian, pero al mismo tiempo está reduciendo aceleradamente los inventarios de DUCs, lo que podría limitar el crecimiento de la producción de petróleo en los Estados Unidos en los próximos meses.
De las cinco principales regiones productoras de petróleo de EE. UU., los DUCs en las Cuencas Eagle Ford, Bakken y Niobrara disminuyeron a sus niveles más bajos desde diciembre de 2013. Mientras que los pozos sin completar en Anadarko cayeron a sus niveles más bajos desde junio de 2018.
Los indicadores de la perforación de nuevos pozos en los Estados Unidos siguen siendo magras. Al 3 de septiembre, el recuento de equipos activos de Baker Hughes era de 394 plataformas, aunque esa cifra equivale a 181 plataformas más que el año pasado, el número es históricamente bajo en comparación con otros períodos en los que los precios de los futuros del petróleo crudo estaban cerca de niveles similares.
Fuente: Rio negro