Elon Musk dejó abierta esa posibilidad.
Además de fabricar autos que llegan a incomodar a las grandes automotrices tradicionales, Tesla también hace muy bien otra cosa: anuncios que llaman la atención de todo el mundo. Y el último de Elon Musk no es la excepción.
Tiene que ver con su futuro modelo más accesible, un auto que rondaría los 25 000 dólares en Estados Unidos y que ya podría contar con conducción autónoma por lo que no sería necesaria la presencia de un volante. ¿Realidad o solo un golpe de efecto?
Según el portal Electrek, Musk habría preguntado dentro de su empresa si están preparados para que el vehículo directamente no tenga volante, una jugada desde ya arriesgada si se tiene en cuenta la desconfianza que la conducción autónoma genera en muchas personas (el propio Musk reconoció que el camino está siendo más difícil de lo pensado).
El hecho es que no se está hablando de esto para el largo plazo sino para el cortó: el vehículo estaría listo para 2023, aunque es sabido que los anuncios de Tesla se suelen demorar luego.
Un dato a tener en cuenta: aunque Musk no entró en detalles, los vehículos autónomos que se están proyectando en la industria, y en cuyas fotos se puede ver que carecen de volante y pedales, en realidad lo que hacen es ocultarlos. Es decir, tienen porque la opción de manejar siempre está, pero los pueden ocultar.
Este nuevo modelo de Tesla se podría llamar Model 2 y ser un SUV más chico que el Model Y, en lo que pasaría a ser la entrada de gama de la marca, un espacio que hoy ocupa el Model 3 con un precio de 35 000 dólares.
Una de las claves del nuevo modelo es la tecnología de baterías y celdas de Tesla, un nuevo proceso de fabricación que permite reducir el costo de las baterías en un 50%.
Inicialmente está pautado que la producción de este modelo comience en China, para desde allí abastecer a diferentes mercados.
Gurú en contra de la pick up de Tesla
Dáis atrás Jim Cramer, un famoso presentador de la televisión norteamericana (Mad Money, CNBC) especialista en negocios calificó a la Tesla Cybertruck como “una monstruosidad” en comparación con la F-150 Lightning, la bestial pick up eléctrica de Ford. “Va a ser un desastre. El primer desastre de Elon Musk. Lo puedo ver…”, aseguró.
“Todavía me gusta Tesla y creo que ha sido injusta la forma en que se ha criticado a su conducción autónoma. Hay muchos más accidentes de conductores alcoholizados. Pero estoy seguro de que esta camioneta va a ser un desastre”, dijo el famoso gurú del mercado, sin titubear.
La confiabilidad de la futura pick up se puso en duda desde el primer minuto: durante la presentación, Elon Musk quiso mostrar que los vidrios no se rompían, pero invitó al jefe de Diseño de la automotriz a golpear los cristales con una bola de acero y sí, se rompieron.
Sobre su polémico diseño, el CEO y fundador de la compañía norteamericana reconoció que “si la gente no compra su estilo único, Tesla construirá una camioneta normal. No hay problema”, cuando fue consultado acerca de qué pasaría si resultara un fracaso comercial.
Musk aclaró en varias ocasiones que la versión final de la pick up tendrá algunos cambios en relación al prototipo visto en aquella presentación en la que los vidrios a toda prueba fallaron. Sin dar mucho detalle, dijo que será “un poco mejor”.