Es por la recuperación en la actividad que produjo el lanzamiento del programa oficial.
Las estimaciones surgen además en el contexto de un encarecimiento de la canasta de los combustibles importados. Según fuentes oficiales, el refuerzo de combustibles para las centrales termoeléctricas que hizo Cammesa la semana pasada terminó costando tres veces más barato que los últimos valores de importación.
Otro punto que destaca la Secretaría de Energía, es que el volumen incremental de gas natural permitió evitar que el pico de demanda registrado en las últimas dos semanas del mes de junio ocasionara cortes en el sistema eléctrico del orden del 12% de la provisión del servicio.
Por otro lado, el repunte de la actividad también viene redundando en mayor nivel de empleo. “Es una alegría ver cómo más de once mil trabajadores que habían sido despedidos o estaban suspendidos en sus casas por la parálisis de la producción que heredamos, hoy levantan los equipos, perforan y generan esta verdadera resurrección de la explotación gasífera”, señaló el secretario de Energía, Dario Martínez.
En referencia a las importaciones, el funcionario explicó que “se combinaron distintas situaciones para que hayan crecido, como la sequía histórica de las cuencas del Paraná, el Uruguay y el Limay, los paros de gremios navales y la parálisis de 22 días de la actividad en Vaca Muerta durante abril, entre otras cuestiones”. Al mismo tiempo resaltó que “si el Plan Gas.Ar no hubiera aportado 2.777 millones de m3, la importación de combustibles alternativos se hubiera duplicado con el consiguiente costo fiscal y erogación en divisas”.
Desde el Gobierno señalaron que todas las empresas en todas las cuencas están cumpliendo con la inyección comprometida. En ese sentido, destacaron que las cuencas Neuquina y San Jorge superan la producción de gas del año pasado en 10% y 5% respectivamente y especificaron que “las tres empresas de mayor producción están inyectando desde Vaca Muerta 5 millones de m3/día más que el año pasado”.