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En lo que va de julio agroexportadores ingresaron al mercado de cambios más de u$s2.400 millones. Las proyecciones indican que el sector todavía tiene por devengar u$s16.000 millones.

En lo que va de julio las firmas agroexportadoras ingresaron al mercado de cambios local más de u$s2.400 millones lo que representa un incremento de más del 15% respecto al mismo mes del año anterior y muy por arriba de los pronósticos más desalentadores que vaticinaban una pronta “sequía” de dólares del campo. De esta manera, el ingreso extraordinario de divisas se consolida como el factor clave que continúa mirando el Gobierno para esperar en los próximos días una mayor calma en la cotización de la divisa norteamericana, sobre todo en el blue que ayer cerró en torno de los $184,50.

Concretamente, la mirada del oficialismo es que en los últimos días hubo una sobrereacción del mercado ante las medidas de mayor control sobre el CLL y proyectan que paulatinamente el mercado saldrá de esta escalada que hoy presiona sobre el billete paralelo y en menor medida sobre los financieros, justamente, gracias a la intervención que ejecuta el BCRA.

En este contexto, el economista Sergio Chouza analizó en diálogo con Ámbito: “No veo que pueda haber una sobre reacción consistente en el mediano plazo. Hoy la economía muestra señales macro que continúan en un camino de ordenamiento, el BCRA compró más de u$s7.300 en lo que va del año, más la mitad de eso lo tradujo a reservas que ya quebraron los u$s43.000 millones, en el plano fiscal el dato del primer semestre con 0,5 del PBI aún hay que restarle los ingresos extraordinarios, o sea que estas a menos de un punto del PBI cuando la meta fiscal primaria es del 4,5, lo que significa que hay margen. Además hay que tener en cuenta que aún con una pandemia se sigue ordenando la macro gradualmente como fue proyectado. Concretamente no veo desbarajustes macro que puedan impulsar una mega corrida independientemente del resultado electoral, así sea menos en línea con las afinidades del mercado”.

Lo cierto es que de cara a lo que resta del año y principalmente, más allá de la presión que genera sobre el tipo de cambio el clima pre electoral, el Gobierno continúa teniendo a su favor, como sucedió en el primer semestre del año, el extraordinario ingreso de divisas del sector agroindustrial y así lo confirma un informe de la Fundación Mediterránea que proyecta que durante el segundo semestre el sector aportaría alrededor de u$s16.000 millones.

“En un escenario base de volúmenes y precios, se estima que las exportaciones de granos y principales derivados industriales de 2021 (devengadas) se aproximarían a u$s36.000 millones, con una mejora de u$s9.600 millones respecto al 2020. En cuanto a la distribución temporal, unos u$s20.000 millones se habrían devengado ya en el primer semestre, restando u$s16.000 millones para el segundo, que se estarían distribuyendo, considerando la estacionalidad de últimos años, en u$s9.000/u$s10.000 millones en el tercer trimestre y u$s6.000/u$s7.000 millones en el cuarto trimestre. Como el cobro de exportaciones de granos por parte del BCRA en últimos 12 meses se muestra muy convergente a las exportaciones devengadas (mismo período), los flujos devengados antes estimados pueden ser también una buena aproximación del ingreso de dólares al BCRA”, según proyecta la Fundación Mediterránea.

Teniendo en cuenta estas variables, el Gobierno tendría un fuerte sostén no solo de cara a septiembre sino para lo que resta del año en cuento a la disponibilidad de dólares frescos y por eso, más allá de las turbulencias de la última semana, el pronóstico es que el mercado iniciará una fase de nueva calma.

 

 

Fuente: Ambito