Es por eso que, a pesar de que la soja logró recuperar su valor -ayer cerró en el mercado de Chicago a u$s519,92 la tonelada- se encienden luces amarillas respecto a la disponibilidad de dólares que tendrá la economía en los próximos meses.
Siempre y cuando la soja se mantenga en los actuales valores, las proyecciones más alentadoras detallan que durante el período junio- julio- agosto, las empresas agroexportadoras liquidaran alrededor de u$s6.690 millones. Lo peor vendrá a partir del trimestre septiembre – octubre -noviembre, cuando el sector aportaría apenas u$s1.000 millones. A su vez, en diciembre se liquidarían unos u$s2.300 millones, para cerrar el año en de u$s23.200 millones.
En la vereda de enfrente y teniendo en cuenta la extrema volatilidad que se espera el mercado, según las proyecciones del economista Salvador Di Stefano, Argentina podría perder cerca de u$s6.800 millones para engrosar sus reservas y $172.000 millones por ingresos fiscales, en el caso de que la soja vuelva a caer por debajo de los u$s490.
“Aquellos que le rezaban a la santa soja tendrán que cambiar de santo o comenzar a hacer un poco más de austeridad fiscal. Los ingresos fiscales que no lleguen serán reemplazados por emisión, ergo habrá más abundancia de pesos. Los dólares que no lleguen los vamos a extrañar, por ende, habrá escasez de dólares. En este escenario, los dólares alternativos estarán a la suba”, detalla Di Stefano a modo de resumen de lo que puede venir en los próximos meses.
En tanto, otro factor a tener en cuenta y que podrá evidenciarse también en las próximas semanas es que si a partir de la caída en las cotizaciones, los productores optan por comercializar menos soja de lo previsto al inicio de la campaña y por el contrario, apuestan a una futura suba del dólar para liquidar su cosecha a mejores valores. De cualquier manera, se vienen días definitorios en cuanto a la disponibilidad de dólares con las que contará la economía argentina en los próximos meses.
Fuente: Ambito