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Desde este mes ya no hay cupo para importar. Los 0 km deben pagar 35% en lugar de 2% y 5%. ADEFA negocia con el Gobierno una extensión.

Con el último día de mayo, cesó la vigencia del decreto que permitía importar vehículos híbridos o eléctricos con preferencia arancelaria. Esto provocó que desde el 1 de junio, los 0 km “ecológicos” tengan que tributar la carga fiscal completa. En algunos casos, implicó que los precios de esos modelos tuvieran una suba del 50%.

Por este motivo, las automotrices y el Gobierno están negociando una extensión de la norma para volver a ofrecer unidades de este tipo de tecnología a valores más competitivos.

Los autos híbridos y eléctricos que se importan de países fuera del Mercosur gozan de un beneficio fiscal que los exime de pagar el arancel externo de 35% que deben abonar los vehículos clásicos. En cambio, los importados de esta tecnología pagan sólo 5%, en el caso de los híbridos, y 2% para los eléctricos. Esto rige para las automotrices radicadas en el país ya que los distribuidores de marcas sin presencia industrial en la Argentina deben tributar el 35% de impuesto aduanero.

Hasta mayo estuvo vigente un cupo de 1.000 unidades que se dispuso a fin del año pasado, por seis meses. Lo que está negociando ADEFA con el ministro, Matías Kulfas, es una nueva cuota de unidades. Las empresas piden unos 3.200 vehículos por año con una vigencia hasta el 31 de diciembre del 2022. Se cree que el nuevo decreto podría estar listo para mediados de junio, en el mejor de los casos.

La marca que lidera la venta de este tipo de vehículos es Toyota, con 80% de las operaciones. Modelos como el Prius, Rav4, Corolla, C-HR, Camry, son algunos de los que comercializa.

La automotriz japonesa difundió a comienzo de mes su lista de precios para junio. En ese listado, sólo aparecía un modelo de este tipo, importado de extrazona: la RAV4. El Corolla híbrido llega de Brasil.

No estaban en ese listado los otros “verdes”. Esto se debió a que el stock de estos vehículos se había agotado y sólo quedaban disponibles unidades de la RAV4. Las mismas se agotaron la semana pasada por lo que la terminal envió una comunicación interna con los nuevos valores.

Por ejemplo, la RAV4 AWD Limited, costaba u$s56.200. Sin embargo, sin este beneficio fiscal, el mismo modelo pasó a costar u$s86.200.

La política de la empresa, hasta que se defina el nuevo cupo, será traer estos modelos a pedido y con el precio vigente en el momento del arribo, condición que se le aclara al comprador. Es decir, si no hay acuerdo para mantener la preferencia arancelaria, pagará el valor con impuesto a pleno.

Esta decisión se toma para aquellos clientes que no quieren esperar y están dispuestos a abonar un monto mayor.

Por ejemplo, el Prius costaba en mayo u$s44.000 y ahora u$s61.000. El C-HR valía 44.100 mientras que el quiera comprarlo, en la actualidad, deberá desembolsar u$s60.600.

Hasta la llegada de este Gobierno, la medida beneficiaba a todas las empresas pero desde el año pasado se limitó, únicamente, a las asociadas a ADEFA. La importación está restringida sobre la base de un cupo que fija el Gobierno y todos los años se va renovando.

Este estímulo al ingreso de vehículos con tecnología híbrida o eléctrica fue implementado en 2017, por el entonces presidente Mauricio Macri, con el propósito de impulsar las motorizaciones menos contaminantes. El cupo original fue de 6.000 vehículos. Las empresas piden la extensión de este alivio impositivo hasta que esté aprobada la Ley de Electromovilidad que establecerá un marco regulatorio definitivo para estos productos. Un tema que viene demorado.

 

Fuente: Ambito