Mañana se aplicará una nueva suba en los impuestos a los combustibles que podría llevar a otro incremento en los surtidores. Si bien todavía no se anunció si habrá un corrimiento en las marquesinas, el alza podría llegar al 3%.
A partir del primer minuto de mañana entrará en vigencia un nuevo incremento en los impuestos que se aplican sobre los combustibles abriendo el interrogante de si esa suba se trasladará automáticamente al precio de los surtidores que en lo que va del año ya tuvieron seis aumentos.
El Decreto 35/2021 fijó que este viernes 12 se aplicará una nueva actualización del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y del Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC) que corresponden en realidad al índice de inflación general que se registró en el último trimestre del año pasado.
Esta actualización de los dos principales impuestos que pesan sobre el segmento implicaría, en caso de no ser absorbida, que los combustibles deberían subir entre un 2,5 y un 3% según su tipo. De esa forma la nafta de mayor calidad pasaría a valer en Neuquén cerca de 77 pesos, mientras que el gasoil premium llegaría casi a los 88 pesos por litro.
Pero aquí es donde se abre el gran interrogante de si el gobierno nacional avalará a las refinerías -con YPF a la cabeza- a aplicar un séptimo incremento en apenas dos meses y medio.
Sucede que el pasado 1 de marzo entró en vigencia un nuevo incremento en el precio de los biocombustibles que las refinerías deben utilizar para preparar los combustibles que venden. Pero esa suba no fue trasladada a los precios de los surtidores que se mantienen estables desde mediados del mes pasado.
Desde el descongelamiento de los precios de los combustibles, en agosto del año pasado, todos los incrementos aplicados por Nación sobre los impuestos del sector fueron automáticamente trasladados al precio de los surtidores, pero en esta ocasión el clima electoral e inflacionario podrían frenar o morigerar ese impacto.
Según aseguró el mismo Alberto Fernández, el gobierno busca frenar el “goteo permanente” de los aumentos en los combustibles, aunque también trascendió que solo se avalarían modificaciones en las marquesinas de las estaciones de servicio cuando se trate de aumentos de impuestos o fuertes subas del dólar.
Los interrogantes se revelarán a la medianoche, cuando se defina si los precios se mantienen estables, si las refinadoras optan por trasladar la suba impositiva al precio del litro, o si se aprovecha la ocasión para compensar además la suba de los biocombustibles e intentar recuperar un poco el margen de operaciones llevando así a un aumento aún mayor.
Fuente: Rio negro