El Gobierno del gigante asiático alertó a la automotriz.
Tesla sumó nuevas denuncias por problemas en sus autos. Esta vez fue en China, donde representantes del Gobierno se reunieron con ejecutivos de la marca para pedirles que garanticen la calidad de las unidades vendidas.
Según aseguraron, recibieron quejas de usuarios por “aceleraciones inusuales”, que se suman a las denuncias de problemas de incendio de baterías y fallas en las actualizaciones del software.
En ese contexto el Gobierno chino le pidió a la automotriz estadounidense que “cumplan estrictamente con las leyes y regulaciones chinas, fortalezcan la gestión interna e implementen regulaciones corporativas de calidad y seguridad”.
Tesla, por su parte, reconoció “deficiencias en el proceso comercial” y se comprometió a solucionarlas, según informó el regulador chino.
Las quejas por problemas de calidad no son exclusivas de China. Tiempo atrás se conoció, por ejemplo, el caso de un Model Y que perdió el techo solar a poco de retirarlo del concesionario.
Otras denuncias que acumula la empresa tienen que ver defectos en el armado del interior, paneles de carrocería mal alineados, apoyacabezas deformados y detalles de terminación. Son todas cosas que suelen ocurrir en fases anteriores a que un auto salga a la venta.
La semana pasada, de hecho, la marca realizó un recall -todas las marcas tienen tienen uno o varios- en Estados Unidos para reparar las pantallas táctiles de los Model S y Model X, que presentaban problemas de fábrica.