La petrolera estatal no logró avances en su primer intento de avanzar en la reestructuración de su deuda, al no reunir a los acreedores en distintas asambleas internacionales para tratar una refinanciación de pagos, por lo que anunció una modificación de su oferta.
Al respecto, la compañía decidió reforzar la estructura de garantías del bono 2026 por medio del ofrecimiento de una prenda en primer grado sobre acciones de su subsidiaria YPF Luz.
Respecto al flujo de intereses durante los próximos años, la compañía incorporó el pago de cupones en los tres nuevos bonos a tasas del 4% para el 2026, 2,5% para el 2029 y 1,5% para el 2033.
Adicionalmente, para incrementar el valor económico de la propuesta de canje, YPF incrementó la tasa de interés de los nuevos bonos 2026 y 2029 del 8,5% al 9%, aplicables desde enero de 2023. También modificó las estructuras de amortización de los nuevos bonos 2026 y 2029 para acortar la vida promedio, entre otras.
Estos cambios se suman al ya introducido el 14 de enero por el cual la compañía modificó las características de las mayorías necesarias para proceder con el cambio de los términos y condiciones no económicos de los bonos viejos, pasando a requerir mayoría absoluta de tenedores de cada serie.
Estos cambios reflejan, una vez más, la visión de YPF en cuanto a su diálogo con el mercado habiendo respondido a la mayoría de las inquietudes planteadas por los inversores, dentro de las posibilidades que tiene la empresa por la difícil situación financiera que le toca atravesar como resultado de los impactos que generó la pandemia que agravaron una situación de declino de la producción de gas y petróleo que la compañía arrastraba de años anteriores.
Fuente: Ambito