El Gobierno agotó en noviembre el primer el cupo para comprar motos. Anunció la segunda etapa pero no hubo más novedades. ¿Qué pasó?
Una de las noticias más alentadoras del 2020 para el sector de motovehículos fue el lanzamiento de una serie de préstamos a largo plazo para la compra de unidades de hasta $200.000. Se lo conoció como plan “Motos para todos” y fue un verdadero éxito.
La novedad llegó después de un largo debate entre el ministerio de Desarrollo Productivo, el Banco Nación y las diferentes cámaras que agrupan al sector, pero lo importante fue que todo logró instrumentarse rápidamente y en menos de 72 hs se habían acabado los cupos.
En total, más de 45 mil personas habían ingresado en tiempo récord al sistema de la entidad para averiguar por la línea de financiamiento para moto.
“Los usuarios que cumplieron todos los requisitos para acceder al crédito superaron holgadamente lo que las fábricas y concesionarias estaban en condiciones de entregar, motivo por el cual se comprometieron a intensificar la producción para satisfacer la mayor demanda de motos en el próximo mes”, explicó en su momento el Banco Nación en un comunicado.
La razón del éxito se debió a la tasa de interés: para quienes cobraran sus haberes a través del BNA, se beneficiaban con una tasa del 28,5% en tanto que para el resto de los usuarios sería del 37,5%.
Ante el éxito logrado, las entidades que programaron el financiamiento anunciaron la instrumentación de la segunda etapa del plan, para la cual se informó que el monto de financiamiento se elevaba a $250.000 y se incluían más modelos para poder elegir.
Esta decisión fue muy bien recibida en el sector ya que la compra de motos es uno de los segmentos donde más se utilizan los créditos a largo plazo, con compradores que, en general, pueden pagar una cuota de un promedio de $6.000 mensuales, como sucede en el caso de los préstamos Mi Moto que otorga el Banco Nación.
¿Qué pasó?
Sin embargo, más allá de los anuncios y la gran expectativa, hasta la fecha, los préstamos de la segunda etapa todavía no han sido instrumentados.
Es más: según adelantaron fuentes del sector a iProfesional, todavía las cámaras y la entidad bancaria están definiendo las condiciones de esta nueva etapa. Es decir, no se ponen de acuerdo sobre cómo seguir.
Son varios los puntos que deberán acordar para salir al ruedo nuevamente, pero sin dudas, uno de los temas claves de este retraso de la puesta en marcha, que debería estar en vigencia desde mediados de diciembre, es que la inflación ha golpeado directamente el valor de las motos como de otros vehículos, y hay que cambiar los montos vigentes al mismo tiempo que cada vez son menos las propuestas que quedan por debajo del tope establecido de 250.000 pesos.
Además, recordemos que los modelos que se consideran solamente pueden ser de fabricación nacional, es decir, ensamblados por alguna terminal argentina.
“Aún no está definido cuándo se pondrá en marcha la segunda etapa del crédito ni el cupo”, respondieron fuentes directas que participan de las negociaciones.
Es decir que el programa no está terminado. Pero tampoco se sabe cuándo se implementará la demorada etapa 2, que debería haberse instrumentado en diciembre pasado.
Las ventajas del plan
El plan, que nació con la posibilidad de financiar hasta $200.000 a través de la línea de crédito del Banco Nación, con plazos de 48 meses y una tasa subsidiada para los clientes del 28,5%, y para no clientes de 37,5%, renovó su cupo incrementando el tope de los montos a otorgar hasta 250.000 pesos.
Para solicitar el préstamo, se debía ingresar al marketplace del Banco Nación. El primer paso consistía en que el usuario pida el crédito al Banco Nación Argentina, a través de su sitio web. Este cliente recibía luego una confirmación vía mail si su préstamo fue aprobado y, en caso de ser afirmativo, recibía luego un link que lo llevará al marketplace, en el cual seleccionaba la moto que quiere comprar.
Los créditos, hasta la etapa 1 no incluían costos de pantentamientos, flete ni administrativos, que debía abonar el comprador.
En el marketplace sólo se le mostraban las motos a las que se podía acceder con el monto del préstamos aprobado y se podía reservar la moto que se quisiera, en el concesionario que fuese de la preferencia del cliente.
Las 16 marcas que participaban del plan (y que seguirían en carrera) son: Beta, TVS, Corven, Bajaj, Brava, Keller, Gilera, Honda, Mondial, Kymco, Motomel, Keeway, Benelli, Guerrero, Okinoi y Zanella.
Para tener una referencia, quien sacó un préstamo para comprar una moto de $150.000 estaría pagando hoy una cuota de $6.019,30 en el caso de un cliente que perciba sus haberes en el BNA y para el resto de los clientes la cuota ascendería a $7.059.