La brecha cambiaria sigue impulsando la demanda en un mercado con faltante de 0 km. Terminales y concesionarias buscan recuperar rentabilidad.
Ese clima pro consumo de autos sigue en estos primeros días de 2021, más allá de que no sea tan pronunciado como tres meses atrás, y permite que las terminales recompongan sus márgenes de ganancias. “No es como antes pero todavía la demanda supera los volúmenes disponibles en la red”, señalaron en otra agencia. La falta de unidades se mantendrá en las próximas semanas ya que tanto muchas de las fábricas en la Argentina o Brasil (principal país de origen de los 0 km que se venden en el país) se encuentran de vacaciones por lo que la asignación de las terminales a sus concesionarias es muy baja. A esto se suma que el ritmo de aprobación de los permisos para importar (SIMI) sigue siendo lento. Es por eso que, en algunos casos, hay lista de espera de unos 90 días.
Modelos como la pickup Chevrolet S10 tuvieron un incremento de 7%. Otros, como la Toyota Hilux, se ajustó por arriba de 5%. En esa línea estuvieron también Etios y Yaris. Esto también muestra que la expectativa inflacionaria que hay en las terminales es mayor al incremento del costo de vida del 2020.
Pese a esta suba de precios, en el sector estiman que las ventas del 2021 serán superiores a las del año pasado. Por ejemplo, empresarios automotrices proyectan para enero un volumen de operaciones por arriba de las 50.000 unidades. Esto sería más del 10% a los vehículos patentados un año atrás.