La firma que conduce Sean Rooney en la Argentina señaló que no sólo no debieron interrumpir la producción en ningún momento, sino que incluso pudieron reanudar sus proyectos en Vaca Muerta.
Consultado por los trabajos de perforación, sostuvo que se perforaron más de 25 pozos en los bloques operados de Sierras Blancas, Cruz de Lorena, Coirón Amargo Sur Oeste y Bajada de Añelo, y se llevaron adelante una serie de obras de infraestructura esenciales para el crecimiento de los proyectos que se tienen en carpeta.
En la misma línea, desde la empresa señalaron que se perforaron pozos de hasta 6.500 metros de largo y 3.600 de rama horizontal y que se lograron récords de eficiencia y tiempo, en pozos de 2.500 metros de lateral en menos de 13 días, con un promedio de 9 etapas por día y un récord de 13 en algunos casos. “Estos parámetros nos ponen en niveles de eficiencia en perforación y terminación de pozos cercanos a los niveles de las operaciones de Shell en Permian, en los Estados Unidos”, señalo Rooney.
“Estamos cerca de alcanzar el máximo uso de la capacidad instalada de 12.000 barriles diarios de procesamiento de nuestra EPF – Early Production Facility – y proyectamos completar el primer trimestre de 2021 la construcción de una segunda planta CPF – Central Processing Facility –, que triplicará esa capacidad a más de 40.000 barriles por día. Además, nos otorgaron en noviembre el primer permiso interrumpible de exportación de gas de Vaca Muerta por hasta 1.25 millones de metros cúbicos diarios con destino a Chile, válido hasta mayo de 2021”, sostuvo.
Con respecto al año próximo, desde la firma sostuvieron que en el marco del proyecto de desarrollo que tienen en los bloques Sierras Blancas, Cruz de Lorena y Coirón Amargo Sur Oeste, triplicaran la capacidad de procesamiento de crudo. A los 12.000 barriles adicionales de capacidad que registran actualmente en la planta de producción temprana, sumarán 30.000 barriles de petróleo diarios de capacidad a través de la puesta en funcionamiento de una segunda planta en Sierras Blancas.
“En total entre todos nuestros bloques operados, esperamos perforar más de 40 pozos nuevos. Con ellos, en el mediano plazo, esperamos poder abastecer ambas plantas con producción propia”, dijo Rooney. “En Bajada de Añelo, continuaremos con nuestro plan de perforación de pozos para seguir ganando conocimiento del área y diseñando nuestro plan de inversión en el área. Además, seguiremos realizando una serie de obras de infraestructura, entre las cuales se destaca el oleoducto desde Sierras Blancas a Allen, para transportar nuestra producción”, concluyó el directivo.