El holding apunta a potenciar la tradicional marca y a expandir sus negocios en movilidad sustentable para seguir ganando market share
A partir de la puesta en marcha de un plan orientado a potenciar su división de motos; del desarrollo de buses eléctricos y a GNL y el incremento de la comercialización de autopartes, el Grupo Iraola proyecta incrementar su facturación de los actuales u$s219 millones con los que cerrará este año, a los u$s320 millones que estima para el 2022.
La estrategia se apalanca en la expansión del principal negocio de este holding industrial local que pasa por la fabricación y comercialización de marcas nacionales como Zanella; Corven y Mondial, y las representaciones internacionales que tiene para Kawasaki; Bajaj y Kymco.
Por lo menos así lo anticipó Leandro Iraola, presidente del Grupo Iraola, y para quien en los próximos años habrá oportunidades para seguir expandiendo las actividades de sus diferentes áreas de negocios, teniendo en cuenta además que los mercados de producción de buses amigables para el medio ambiente y el sector de reposición de autopartes también aportarán para alcanzar dicho objetivo.
Nuevo impulso a las motos
En el caso de su división Corven Motos, es actualmente la líder local con un 37% de market share, busca seguir por el mismo camino a partir de planes de negocios que abarcan a varias de sus marcas.
Una de ellas es Zanella, adquirida a principios de este año luego de un conflictivo proceso que involucró una disputa judicial contra sus competidores de Motomel.
A partir de los primeros días del 2021, la marca será reposicionada por Corven en el mercado, teniendo en cuenta que es la principal marca local, con una participación actual del 14% y un excelente posicionamiento e imagen entre los consumidores locales.
Según explicó Iraola durante una charla con periodistas, “Zanella es la marca más emblemática del negocio de motos de la Argentina”.
Sus palabras fueron respaldadas por la opinión de Facundo Lippo, director Comercial de Corven Motos y con pasado en la misma área ejecutiva en Zanella, también presente en la reunión que se llevó a cabo en la planta que el Grupo Iraola posee en la localidad bonaerense de Moreno.
Para el ejecutivo, se trata de la primera elección que hace un comprador de motos que posee un importante factor sentimental, por lo cual apostarán a un plan de expansión que tendrá varias etapas.
Una de ellas es la de la apertura de tiendas Zanella para comercializar los modelos de esta marca, un cambio de logo en los actuales concesionarios, el fortalecimiento de la actual línea de modelos y la ampliación hacia otros productos, además de utilizar un particular formato de franquicias comerciales a, por ejemplo, los scooters.
“El relanzamiento oficial será durante el primer trimestre del 2021, y creemos que será exitoso, más allá de cuál sea el escenario económico del país y porque ya tenemos experiencia en crecer durante tiempos de crisis como también lo hicimos en el 2001; el 2009; el 2015 y ahora”, aseguró Iraola.
El plan apunta a llevar a Zanella del actual 4% de posición de mercado a un 14% a mitad del año próximo, a partir de toda la estrategia de reconstrucción de su identidad explicada por ambos ejecutivos.
A esto le sumarán un trabajo fuerte en el sector Premium con el inicio de la producción de varios modelos de Kawasaki y una recomposición de mercado para Mondial, que hoy alcanza al 5%, además de profundizar la presencia de Kymco en el segmento del scooter.
La visión de los propietarios de este grupo también apuesta a un crecimiento del negocio global de motos que esta año terminará cerca de las 275.000 unidades vendidas, pero con posibilidades de expandirse en el 2021 a las 375.000 unidades a partir de créditos a tasas de interés accesibles, y de planes oficiales como Ahora 12 y Ahora 18 y las líneas de financiamiento lanzadas recientemente por el Banco Nación para la compra de varios modelos y que será ampliado en las próximas semanas.
Este panorama es compartido por Iraola, quien asumió el control del grupo en 1994, tras el fallecimiento de su madre que, a su vez, había liderado la compañía desde la muerte de su esposo y fundador del conglomerado, Leandro José Iraola en 1982.
La expansión de Corven
Con sede en Venado tuerto, Corven fue fundada en 1969 como una fabricante de amortiguadores, un plantel de cuatro empleados y una producción mensual de 3.000 unidades, en especial para camionetas usadas por la industria petrolera.
En la actualidad, el grupo tiene varias divisiones de negocios; 1040 empleados; un volumen de facturación global de u$s219 millones; el 37% del mercado de motos y una producción mensual de 120.000 amortiguadores.
Según sus ejecutivos, es líder tanto en el sector de motos como en el de amortiguadores, con el 36% del share y por encima de marcas tradicionales como Fric-Rot (11%), y Monroe (11%), entre otras.
Posee además plantas en China y Brasil y exporta a 35 países y hace unas semanas anunció el inicio de la producción local de varios modelos de Kawasaki en el marco de un plan que contempla inversiones por casi $1000 millones durante lo que resta del 2020 y los próximos dos años con el objetivo de llegar a producir cuatro modelos en el 2021.
“Nos estamos preparando porque el mercado de motos va volver a crecer como en los mejores momentos, y porque vimos cómo, a pesar de la crisis del 2018 y de la pandemia, se incrementaron las operaciones porque mucha gente eligió la moto como medio de movilidad por las facilidades y rapidez para obtenerlas, y pro sus precios accesibles”, explicó Lippo.
Impacto de la pandemia y nuevos proyectos
Del mismo modo, Iraola consideró que tanto la crisis iniciada en el 2018 y la pandemia después llevaron a que se hayan atravesado “unos años duros para todos, tanto para los bolsillos de los consumidores como para los empresarios, al punto que nuestro grupo sufrió problemas financieros y pérdidas hasta la mitad de este año, cuando empezamos a equilibrar nuestras cuentas y generar nuevamente rentabilidad”.
En este sentido, consideró que el primer período de mandato del presidente Alberto Fernández tuvo aspectos positivos que ayudaron a revertir la situación negativa como la renegociación de la deuda y el acuerdo con el FMI, entre otros.
En cuanto a la pandemia, estimó que todavía se mantiene la incertidumbre sobre el futuro y que la sociedad sufrió un fuerte desgaste por las medidas de restricción para combatir la pandemia del Covid-19.
“El coronavirus neutralizó la gestión del Gobierno, aunque igualmente estimo que se precisan cambios y una agenda de crecimiento pensando en salir de esta situación para volver a incrementar la producción”, aseguró Iraola.
El empresario agregó que el inicio de nuevos proyectos por parte de su grupo “va en esa dirección”, como el desarrollo de buses impulsados a electricidad y GNL como las unidades ya vendidas al gobierno de Mendoza y a YPF, respectivamente.
“La movilidad sustentable es algo que está llegando fuerte y que cambiará la matriz energética del país, por lo que nos estamos preparando para participar también de esa ola”, explicó Iraola.
Fuente: Iprofesional